Tercer anillo para la franquicia de Seattle, una ciudad ávida de baloncesto y que recibe buenas dosis de ello a través de las Seattle Storm. Las jugadoras dirigidas por Dan Hughes, primer anillo para él, barrieron en las Finales a las Washington Mystics. El tercer y definitivo partido, disputado en la capital de los Estados Unidos, se saldó con un claro triunfo de las Storm (82-98). Las de Seattle vuelven a la gloria máxima de la WNBA tras haber ganado el campeonato en 2004 y en 2010. Sus tres títulos hacen que sea la segunda franquicia más laureada de siempre, empatada con Los Angeles Sparks, las Detroit Shock (ahora Dallas Wings) y las Phoenix Mercury, y solo superada por las Minnesota Lynx y las Houston Comets, ambas con cuatro entorchados.
Stewart, MVP doble
Las Finales no veían un barrido desde 2014. Este 3-0 tiene en gran parte la firma de Breanna Stewart, MVP de la WNBA y MVP de las Finales. Un doblete el suyo de 2018 que no hace más que engrosar un palmarés excelso para su todavía corta edad. Stewart, de 24 años, ha ganado cuatro títulos de la NCAA, con sus correspondientes cuatro MVPs, además de una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, con la selección de Estados Unidos, y de ser Rookie del Año en la WNBA. Una lustrosa sala de trofeos a la que añade los reconocimientos individuales de MVP y el campeonato de la WNBA.
Bird, mito
Stewart puede sumar otro título más este mes. Será en el Mundial que se disputará en España a finales de septiembre. Allí compartirá presumiblemente equipo con Sue Bird, quien a sus casi 38 años y toda una vida en las Storm, ha conquistado su tercer anillo como profesional. Bird, cuádruple campeona olímpica y triple campeona mundial, fue clave en las semifinales para desatacar el quinto y definitivo duelo ante las Mercury… dos días después de haberse roto la nariz.