El fuerte golpe en la nariz sufrido por LeBron James durante el encuentro que enfrentó a los Heat con los Thunder fue más aparatoso que grave en sus consecuencias. Así, el propio «6» de Miami espera poder jugar este domingo ante los Chicago Bulls, según anunció ESPN.com de acuerdo a fuentes de la liga.
Aunque no se espera que el percance le impida volver a vestirse de corto, James se encuentra dolorido y posee una notoria inflamación en su nariz después del golpe sufrido en un lance frente a Serge Ibaka.
Asimismo, los servicios médicos de los Heat se encontrarían esperando a que la hinchazón remitiese para poder determinar el tratamiento a seguir.