Lonzo Ball, estrella de UCLA, sigue destacando en el interesante March Madness. Sin embargo, su padre LaVar Ball ha sido protagonista por temas ajenos al mundo de la canasta. Su actitud, chulesca y provocativa, podría provocar que su hijo cediera posiciones en el próximo Draft 2017.
El padre de la saga Ball declaraba recientemente a USA Today que batiría en un 1 contra 1 al mismísimo Michael Jordan. Asimismo, se conformaba con nada menos que 1 billón de dólares en patrocinio deportivo para sus tres pupilos.
Su actitud, que mucho gusta a los medios de comunicación, pero poco al mundo de la NBA, no le hace ningún favor a Lonzo. No obstante, son muchos los ejecutivos de la NBA quienes afirman «no prestar atención» a sus bravuconadas. Precisamente uno de ellos, Danny Ainge, general manager de Boston Celtics y que podría aspirar al número 1, ya ha dejado claro que «nunca antepondría a la familia de un jugador si éste le gusta como juega».
Kerr: «No creo que ayude a sus hijos»
El técnico de Golden State Warriors ha hablado claro sobre la actitud de LaVar Ball. Entiende su objetivo, que no es otro que se hable de sus hijos; sin embargo, no cree que sea lo conveniente para su futuro en el mundo de la canasta.
«El hecho de que todo el mundo siga hablando de él… Parece que está logrando su objetivo porque las cosas que dice son tan extravagantes. Pero sigue acaparando titulares, que en realidad es lo que quiere», explicó Kerr a SportingNews.
«No creo que esté ayudando a sus hijos. Creo que para ellos sería mejor si pudieran jugar y divertirse, y no tener que escuchar eso todos los días. Pero todo es parte de él», añadió.