Dirk Nowitzki ha hablado en SiriusXM NBA Radio sobre la situación actual de la NBA. El alemán, con 19 temporadas de bagaje en la liga, considera que la lealtad se ha perdido en cierta medida y que ahora lo que importa en la NBA es más vencer y acumular dinero que ser leal a una franquicia.
“La nueva NBA es un poco diferente. Se trata más de ganar y de hacer dinero, y no tanto de ser leal”, aseguró el jugador alemán.
Si hay alguien indicado para señalar este nuevo paisaje de la NBA es el ala-pívot de los Mavericks, no sólo porque suma casi dos décadas en la competición desde que debutara en 1999, sino porque su caso ha sido el de ese jugador que se recorta el salario, que renuncia a ganar más, para permanecer en el lugar donde se encuentra cómodo y facilitar, de paso, las cosas a su equipo. “Para mí siempre ha sido sencillo ser leal”, puntualizó el teutón.
Una carrera millonaria
Su comprobada fidelidad a los Mavericks, que le ha reportado un MVP de la NBA en 2007, trece presencias en el All-Star, el anillo de campeones en 2011 y el honor de ser el sexto máximo anotador de la historia de la liga con sus 30.260 puntos anotados, no es óbice para que Robin Hood haya amasado al mismo tiempo una fortuna millonaria. Según datos salariales obtenidos de Basketball Reference, el de Dallas ha ingresado cerca de 250 millones de dólares desde su primer contrato en el lejano 1998.
Sus recortes salariales
Dirk Nowitzki firmó este verano su renovación con los Mavericks. Lo hizo con números redondos: 2 años, 10 millones dólares, 5 en cada curso y el segundo de ellos con una team option. Este gesto de Nowitzki, en una cuenta corriente sobrada de ceros, ayudó a los Mavericks a no volverse locos salarialmente para retener a su mito, a la vez que no les ahogó con una nómina que pudiera hipotecar el resto de movimientos. Nowitzki venía de cobrar 25 millones de dólares en la 2016-17, una subida espectacular de sueldo tras haber percibido algunos más ‘modestos’ en la 2014-15 (7,97 millones) y en la 2015-16 (8,3 millones).