¡Qué gran equipo son estos Magic! Según muchos aficionados, los Magic eran unos teóricos convidados de piedra en la finales del Este para rendir pleitesía a King LeBron en su camino hacia la final, pero se han convertido en una pesadilla para los Cavaliers de la que no saben como despertarse. Un triple milagroso sirvió una vez, pero necesitan tres victorias más en cuatro partidos para no empezar las vacaciones antes de lo pensado.
El encuentro de anoche fue muy duro: 86 tiros libres, 58 faltas personales, 2 técnicas, una flagrante y varios puntos de sutura en la cara de Mo Williams. Orlando es un equipo que cuenta con muchas variantes en ataque y defensa que se adapta fácilmente a cualquier situación, como a la batalla subterranea que ayer se libró en el Amway Arena.
Los principales jugadores de Cleveland estuvieron fallones de cara al aro y por ahí se escaparon todas las posibilidades de victoria para ellos: LeBron James 41 puntos, 7 rebotes y 9 asistencias pero con 11 de 28 tiros de campo y 5 libres fallados en el último periodo, Mo Williams 15 puntos con 5 de 16 como estadística, Ilaguskas falló 7 de los 10 lanzamientos que intentó… Por no hablar del 19% de los de Ohio en triples, prácticamente la mitad (35.3%) de lo logrado por los de Van Gundy.
Dwight Howard fue el máximo anotador de su equipo aportando 24 puntos y 9 rebotes en solo 28 minutos de juego por problemas de faltas. Rafer Alston (18 puntos) y el francés Mickael Pietrus (16, 6 rebotes y 2 tapones) estuvieron a muy buen nivel mientras que Turkoglu completó una horrible noche en el tiro -1 de 11- pero sumó 13 puntos, 10 rebotes y 7 asistencias.
Ahora los Cavs se encuentran contra las cuerdas y vuelven a jugar en el Amway, pabellón donde han perdido en 6 de sus últimas 7 visitas. Una derrota más sería fatal.