Previa NBA 2016-17: Dallas Mavericks

Así empiezan la temporada

Alergia a la reconstrucción. El acuerdo es ése. Mientras Dirk Nowitzki aguante, ni retirada, ni rendición ni, por tanto, reconstrucción. Es un pacto de caballeros entre él y Mark Cuban. Pero no es sólo ya una cuestión de premiar la fidelidad del mito teutón; porque resulta que al mito aún le quedan flechas en el carcaj. Y mientras Robin Hood mantenga su puntería, el dueño de los Mavs —y cien empresas más— seguirá proveyéndole de un equipo competitivo. Este año, con un Oeste extremadamente armado, no será fácil repetir Playoffs. Pero en Dallas han cumplido, y roster para morder hasta el final, hay.

«Los modestos» de Golden State. No cabían todos salarialmente en la bahía de Oakland, y ahí han estado los tejanos con la red. Harrison Barnes y Andrew Bogut suenan muy pero que muy bien. Ambos vienen a satisfacer necesidades bien distintas. Con el australiano, si no se lesiona, salen ganando claramente en el trueque con Pachulia, y en cuanto a Barnes ya lo han franqueado con el contrato de superestrella. Su techo, en mi opinión, también es superior al del trásfuga Chandler Parsons. Deron-Matthews-Barnes-Nowitzki-Bogut. No suena mal, ¿verdad?

Tenemos a Rick Carlisle. Y eso siempre es un muelle de confianza para cualquier vestuario. Porque Carlisle es de los que marca la diferencia. No en vano es de los técnicos más valorados de la NBA. Disponer de este head coach significa poder convertir en fiable a un jugador volátil; exprimir el agua que contiene un saguaro. Pianista y piloto de avionetas, el polifacético técnico goza de ese abanico de recursos para convertir a Harris, Acy, Curry (la demo), Brussino, Powell y Anderson en una más que sólida unidad de repuesto y alcanzar los Playoffs por cuarto año consecutivo (y decimoquintos en 16 años). Eso sí, desde que se auparan con aquel insólito anillo en la 2010-11, han sido incapaces de superar una primera ronda.

La plantilla

Altas: Quincy Acy (New York), Harrison Barnes (Golden State), Seth Curry (Sacramento), Nicolás Brussino (Peñarol), Dorian Finney-Smith (Florida), Jonathan Gibson (Qingdao), A.J. Hammons (Purdue), Keith Hornsby (LSU), Jameel Warney (Stony Brook), C.J. Williams (JDA Dijon).

Siguen en el equipo: Justin Anderson, J.J. Barea,Wesley Matthews, Salah Mejri, Dirk Nowitzki, Dwight Powell, Deron Williams.

Bajas: Raymond Felton (L.A. Clippers), Jeremy Evans (Indiana), John Jenkins (Phoenix), David Lee (San Antonio), JaVale McGee (Golden State), Zaza Pachulia (Golden State), Chandler Parsons (Memphis), Charlie Villanueva (agente libre).

Rotación 2016-17

  • Bases: Deron Williams, Devin Harris, Jonathan Gibson, J.J. Barea, Kyle Collinsworth, Keith Hornsby.
  • Escoltas: Wesley Matthews, Justin Anderson, Seth Curry, C.J. Williams.
  • Aleros: Harrison Barnes, Nicolas Brussino, Dorian Finney-Smith, Jameel Warney.
  • Ala-pívots: Dirk Nowitzki, Quincy Acy, Dwight Powell.
  • Pívots: Andrew Bogut, Salah Mejri, A.J. Hammons.

La estrella

Dirk Nowitzki (ala-pívot, 38 años).

Incluso si hubieran fichado este verano a LeBron James, me habría costado dirimir cual es la estrella. Tiene bemoles la cosa, pero toda una franquicia del interior de los Estados Unidos gira entorno al fadeaway de un jugador del interior de Europa. Robin Hood Nowitzki se unió a la familia tejana en 1998 y lleva más de quince años siendo allí toda una institución. Es que sólo con Kobe Bryant y Tim Duncan veo un paralelismo similar.

Pero éste no ha entrado todavía en su último capítulo. Tras una temporada para tomar aire, Dirk volvió a aumentar la cadencia, relanzando sus números una vez más. Sus 2,13 siguen soportando la media hora por partido, y él sigue manteniendo su eficiencia. 18,3 puntos y 6,3 rebotes, volviendo a superar la veintena en la ronda de Playoffs. Exquisito y sobrenatural.

Quincy Acy y Andrew Bogut llegan para tapar las carencias defensivas que crecen cada año en Dirk; y Dwight Powell debería ir aportando alternativas y deshaogo en ataque. Pero para cuando toque arrebato, cuando el balón queme y el aro se encoja, entonces que se la den a él; que la diana espera.

El recién llegado

Harrison Barnes (alero, 24 años).

Quizás la estrella por necesidad, en un mercado que giraba entorno a la decisión de Durant, y cuyo caramelo inmediato del backcourt tras el nuevo de los Warriors (obviando el crazy deal de Batum) era él. Muchas expectativas, similar nivel de incógnitas. Hacerse con cierto nombre y cruzar el marco del Team USA en un conjunto con Curry, Klay e Iggy ya dice bastante. Barnes arribó a la NBA como un prodigio atlético que luego supo encontrar también su rol desde el triple en Golden State.

Barnes es la fuerte apuesta a esquivar de manera definitiva la reconstrucción a golpe de draft. No se esconde, no le ciegan los focos y está ante ‘SU’ oportunidad. Más que opinar y prever, mejor sofá y ver.

El jugador de futuro

Dwight Powell (ala-pívot, 25 años).

Son ya 25 años, por lo que su futuro no puede hacerse de rogar mucho más. Su lustro de apogeo debe desencadenarse ya. Estrena su cuarta temporada en la NBA, y los aros de Dallas suplican argamasa. Carlisle no le premió ni con 15 minutos de media el año pasado, pero es de suponer que este año relajará en tacañearía.

Powell es fuerte, medianamente habilidoso y contumaz bajo el aro. Nunca será una superestrella, pero sí tiene a su alcance convertirse en la pieza que de la estabilidad necesaria la zona pintada de los Mavs en su inminente periodo de transición. O, quien sabe, empezar a edificar junto a Barnes, sobre el mismo esqueleto del decadente rascacielos, una nueva armadura robusta, brillante… y aspirante.

Resumen de franquicia

  • Entrenador: Rick Carlisle (9ª temporada en el equipo).
  • Clasificación 2015-16: 42-40 (6º Oeste, Primera ronda).
  • Espacio salarial: $ -17,8 millones.
  • Agentes libres más importantes en 2017: Dirk Nowitzki (opción de equipo), Andrew Bogut, Deron Williams, Justin Anderson, (opción de equipo).

El pronóstico

Elio Martínez, director de nbamaniacs, dará un pronóstico personal y subjetivo sobre lo que cree que hará cada franquicia durante la temporada 2016-17.

Respeto eterno a Nowtizki por parte de medios y aficionados. El alemán es un jugador histórico que juega cada partido como si fuera el último y seguirá dándolo todo por acceder a Playoffs pese a contar con 38 años, dos MVPs y un anillo. El quinteto inicial es de garantías —si a Barnes le entran los tiros y Bogut está sano— y Rick Carlisle es toda una institución en los banquillos NBA, por lo que estamos hablando de un equipo serio que no se dejará llevar en ningún momento. Los Mavs deben estar en las eliminatorias por el título.


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