‘Top Plays’ de la jornada: la norma del alley-oop

De gustibus non est disputandum. Y por ello, esto no es ni una crítica ni un intento de poner a la NBA en el yugo, sino una invitación a nuestros lectores al debate.

Para aquellos que trasnochar no es una opción y las prisas mañaneras les pisan los talones, existen dos modos —además de nbamaniacs, por supuesto— de informarse sobre lo que acaba de pasar en el universo NBA la madrugada anterior: uno breve y otro extremamente breve.

El breve ‘a secas’, se materializa en unos vídeos de poco más de nueve minutos —de no diremos qué Youtuber—, donde se condensan prácticamente la totalidad de las canastas del partido en cuestión. El extremadamente breve, para esos otros que apenas tienen tiempo de quemarse la lengua con el café, se resume en el Top-10 de la jornada que cada mañana nos brinda el canal oficial de la NBA.

Pues bien, es a este respecto —respecto de unas 450.000 reproducciones de media— ante el que propongo una valoración, ya que estos vídeos prometen, ya desde el título, ser el compendio de lo más espectacular y delicioso de lo acaecido en las canchas de básquet la noche anterior. Tres minutos de frenesí puro.

Lo mejor de lo mejor

La realidad es que ni puede llover al gusto de todos, ni son factibles tantos referendums como a algunos les gustaría. Por lo tanto, debe ser un selecto y reducido equipo de la Asociación Nacional de Baloncesto norteamericana, el que se encargue de cribar y seleccionar las mejores canastas para aglutinarlas en un Top diario.

«Las mejores»: concepto polémico y abstracto desde el inicio.

Intentamos aplicar la lógica humana. A falta de texto positivo que defina qué es lo mejor, tratemos de pensar qué dos (o tres) adjetivos podrían ser los más idóneos para disponer de un punto de partida sobre el que discutir y valorar, qué puede ser lo mejor, lo mejorcito, que nos regala la NBA noche tras noche sobre los parquets. A mi se me ocurren dos —se aceptan sugerencias—: dificultad y espectacularidad. Podríamos añadirle un tercer factor: la trascendencia, por no dejar fuera el repertorio habitual de game winners y buzzer beaters.

Algo difícil de hacer y algo increíble de contemplar. Parecen dos buenas exigencias, ¿no?

La dificultad no es un concepto excesivamente subjetivo; simplificando, puede medirse como una mezcla equilibrada de talento y trabajo. Sumando ambos, desembocamos en un pequeño número de elegidos capaces de hacer cosas inimaginables para la mayoría de los mortales.

La espectacularidad sobrevive permanentemente atada a la dificultad. Algo espectacular tiende a ser algo difícil, aunque no siempre se cumple esta sinalefa. Hay otro elemento clave para definir la espectacularidad: la frecuencia del acto. Mejor dicho, la no-frecuencia. Algo espectacular tiende a ser algo que no se ve demasiado, que no se repite con irritante asiduidad. Pues entonces trasciende de lo espectacular a lo ordinario.

Los principios generales de lo espectacular y lo difícil, mueren cuando la NBA convierte en costumbre consuetudinaria los alley-oops, carne cotidiana de sus célebres Top-10.

Me explico con el ejemplo de anoche, que a pesar de haber hasta cinco partidos, la Liga consideró que no había sustancia suficiente para diez supercanastas y lo estrechó a un Top-5. Por un tema de derechos, no podemos reproducir aquí la compilación oficial —la vemos pinchando en este enlace. Hoy sin Goatmentator—.

https://www.youtube.com/watch?v=F2o_DYfwa3k

¿Qué nos ofrecen las mejores cinco canastas del 8 de noviembre?

Pues, de menos a más, una espectacular finalización por encima del aro que gana en clímax al ser Aaron Baynes su ejecutor; un feroz y espectacular mate de Andre Drummond, previo pase por debajo de las piernas de Reggie Jackson; un (casi indetectable) crossover de Darren Collison para regalar el alley-oop a Victor Oladipo bajo la canasta; otro alley-oop de Elfryd Payton para un habitual aéreo, Aaron Gordon; y —primer y único no-mate—, un jugadón de Kyrie Irving en el que torea a cuatro lakers nivel «patio de recreo», para terminar anotando una bandeja a tabla.

Resumimos: cuatro mates y una sobrada de Uncle Drew. En la balanza Potencia/Habilidad, desequilibrio absoluto en favor de lo primero.

https://www.youtube.com/watch?v=G0_HxzFybEg

Y mientras, jugadas como esta de arriba, con pase de espaldas (dificultad) y rectificado a aro pasado (dificultad y espectacularidad), cortesía celtic entre Marcus Smart y Semi Ojeleye, caerán en el olvido. El pan tostado de cada día y mañana.


EXTRA NBAMANIACS

Nuestro trabajo en nbamaniacs es apoyado por lectores como tú. Conviértete en suscriptor para acceder a beneficios exclusivos: artículos especiales, newsletter, podcast, toda la web sin publicidad y una COMUNIDAD exclusiva en Discord para redactores y suscriptores.