Es indudable que jugar con hombres más pequeños ha marcado a casi todos los equipos durante el pasado año.
Una constante que ha modificado el estilo de juego, donde los lanzamientos exteriores cobran mucha más importancia que los interiores y donde ha habido muchas ocasiones en las que se podía ver que ninguno de los diez jugadores en cancha era un pívot puro.
Y para Brad Stevens, a esta idea de juego hay que darle una vuelta. El entrenador de los Celtics sabe que el small ball le ayudó durante la anterior campaña, pero está interesado en ver quintetos que sean más altos para romper un poco esta inercia.
«Tenemos más jugadores altos que el año pasado, así que tenemos que jugar de una manera un poco más tradicional y estar preparados para hacerlo bien. Haremos lo que sea mejor», confesó Stevens en MassLive.com.