Increíble forma de ganar un partido. Los Dallas Mavericks se han impuesto por 117 a 116 a Sacramento Kings tras dos prórrogas gracias a un triple sobre la bocina de Deron Williams que completaba un parcial de 8-0 para finalizar el partido.
Con apenas 1,3 segundos por jugarse, el base de los Mavs anotó el triple tras recibir el balón, cuadrarse, fintar y tirar. Casi ni pudo mantenerse en pie tras lanzar el balón debido a la velocidad con la que sucedió todo.
Los compañeros abrazaron al base de forma que como él mismo explicó «de repente todo se hizo oscuro y no podía ni respirar». Williams cerró la noche con 25 puntos y 3 de 6 en triples.
DeMarcus Cousins fue el jugador más destacado de Sacramento con 35 puntos y 17 rebotes, su tercer partido consecutivo de al menos 30 puntos. Rudy Gay aportó 31 puntos.
Los Kings no ganan en Dallas en temporada regular desde febrero de 2003, una racha de 22 derrotas consecutivas en el pabellón de los Mavericks.