El All-Star que los Pelicans adquirieron antes del cierre del mercado de traspasos tuvo su primera gran noche en su nuevo equipo. Ante Memphis y ante Marc Gasol, DeMarcus Cousins jugó su mejor partido en New Orleans, liderando un triunfo por 95-82 que mantiene con vida las aspiraciones de los Pelicans de llegar a los playoffs, además de ilusionar a su afición sobre el futuro de su ilustre pareja interior.
El despertar de «Boogie»
41 PTS. 5 made 3s. 17 REBS.
Boogie becomes the second player since '83 to put up those types of numbers (Kevin Love in 2010). pic.twitter.com/QEeRazjq36
— NBA (@NBA) March 22, 2017
Entre Cousins y Davis sumaron 60 puntos y 30 rebotes, una producción espectacular para solo dos jugadores. El ex-pívot de los Kings se llevó la mejor parte, terminando con 41 puntos (incluyendo un 5/9 en triples) y 17 rebotes, números que nunca había alcanzado en sus años de Sacramento. En un duelo entre dos de los aspirantes a ser considerados como los mejores pívots de la NBA, Cousins le ganó claramente la batalla a Marc Gasol.
El All-Star de los Grizzlies, incapaz de detener en defensa a Cousins especialmente tras el descanso, terminó con 10 puntos, 8 rebotes y 4 asistencias, dejando a Mike Conley (16 puntos) y a secundarios como JaMychal Green y Troy Daniels (12 puntos cada uno) la responsabilidad de plantar cara en ataque. Tras una primera mitad igualada y sin demasiado brillo, un descomunal tercer cuarto de DeMarcus Cousins y Anthony Davis (23 puntos entre ambos) dejaba el partido encarrilado para New Orleans.
Todavía vivos
Boogie. AD. All Day. pic.twitter.com/4h6CoAuYH1
— New Orleans Pelicans (@PelicansNBA) March 22, 2017
Sin ninguna de sus estrellas acertada, fue JaMychal Green el encargado de buscar una complicada remontada para Memphis, pero Cousins se ocupó de devolver cualquier golpe recibido ante el delirio de su afición. Fue por fin una noche a celebrar tras un complicado inicio en los que los Pelicans habían acumulado un balance de 4-7 con su pívot disponible, y de 2-0 con Cousins suspendido o lesionado.
Todavía sin permitir celebraciones prematuras, New Orleans consigue al menos agarrarse a sus opciones de colarse en la codiciada octava posición del Oeste. Los Pelicans terminan la jornada en 11ª posición con un balance de 30-41, con tres victorias menos que Denver, hoy por hoy el equipo que cerraría los playoffs. Más noches como la de este martes de DeMarcus Cousins convertirían a New Orleans en un más que digno aspirante en este final de temporada regular.