Quizá la sorpresa de la noche se produjo en Orlando. Aunque tampoco fue algo mayúsculo, no eran favoritos los Magic para tumbar a los Heat. Y lo hicieron (104-101), en lo que fue el estreno de Dwyane Wade y los suyos esta campaña. Para Flash, la última en activo, tras renovar el 16 de septiembre con los de Florida por una temporada más.
Él mismo calificó a esta 2018-19 como la del ‘último baile’, el suyo, antes de la retirada. Pues ha empezado con derrota. Wade, adaptado al rol de suplente que ya asumió en Cleveland y a su regreso a los Heat el pasado mes de febrero, salió desde el banquillo para, en 29 minutos, registrar 9 puntos, 11 rebotes y un mal 3/13 en tiros de campo, algo arreglado con un 3/4 en tiros libres.
A Wade y a los Heat les restan muchos encuentros por delante para enmendar este resbalón inicial, pero no deja de ser llamativo que se vieran sorprendidos por unos Magic que, teóricamente, están llamados a ocupar el vagón de cola del Este. En una velada bastante pareja, Orlando, con Aaron Gordon al frente, dio una alegría a su gente en la apertura del curso. Gordon arrancó con doble-doble de puntos y rebotes: 26 + 10, y un formidable 4/5 en triples. En Miami le intentó hacer frente Hassan Whiteside, titular y una buena noticia para los Heat, que necesitan la mejor versión de este jugador, al que intentaron traspasar este verano, sin éxito. El pívot firmó también un doble-doble, algo más modesto, de 12 puntos y 18 rebotes. Aunque en los Heat los mejores fueron Goran Dragic, +20 con él en pista y 26 tantos y Josh Richardson, 21 tantos para él.
Debut de Bamba
Una de las atracciones de los Magic y de toda la NBA, el novato Mo Bamba, hizo su estreno oficial con Orlando. Bamba, al que de momento tapa en la titularidad Nikola Vucevic– 12 puntos, 8 rebotes y 4 asistencias este miércoles– disputó 24 minutos, para unos aceptables 13 puntos, 7 rebotes y 2 tapones, con un positivo 6/8 en tiros de campo.
