El conjunto de Oregón pidió revisar la acción de Lillard sobre Finney-Smith
Los Portland Trail Blazers se impusieron a Dallas Mavericks en la pasada madrugada por un ajustado 119 a 121. En el final del partido pudimos vivir el primer Coach Challenge que impacta en los segundos finales de un partido. El Coach Challenge es una nueva regla que ha entrado en vigor en este curso —de momento en fase de prueba durante esta campaña— por la cual los entrenadores tienen la oportunidad de pedir la revisión de una jugada determinada durante el partido.
Y en esta ocasión fue Terry Stotts, quien gracias a la inestimable colaboración de su pupilo Lillard, pidió que los árbitros reexaminaran la supuesta falta personal que habría cometido sobre Dorian Finney-Smith y que, de haberse señalado como en un principio señalaron los árbitros, habría cambiado por el completo el devenir del choque.
«Si Damian Lillard no hubiera estado tan convencido, probablemente no habría pedido el Coach Challenge«, señaló Stotts a ESPN. «Hemos discutido mucho sobre esto. Les dije a mis jugadores: ‘Cuando pregunte, tenéis que ser sinceros porque la mayoría de vosotros pensáis que no habéis cometido la personal. Tenéis una responsabilidad. Confiaré en vosotros en estas situaciones, pero tenéis la responsabilidad de saber si hicisteis la falta o no'», agregó.
¿Y por qué estas palabras de Stotts? Si la revisión de Portland hubiera resultado desfavorable para ellos, habrían perdido el último tiempo muerto que les quedaba —consecuencias de la norma— y tan solo restaban unos segundos para el final del choque.
«Lo pensé. Y sabía que este era el momento perfecto porque cuando golpeé, escuché que tocaba el balón», explicó Lillard. «Me acerqué a él y le dije ‘Entrenador, tienes que confiar en mí. Toqué la pelota’. Y él me dijo ‘Solo tenemos un tiempo muerto’. Y le dije ‘De verdad que toqué el balón’. Fue entonces cuando pidió revisar la jugada. Después del partido, cuando caminábamos hacia los vestuarios le dije que podía confiar en mí.
Cuban opina
Marck Cuban, propietario de los Mavericks, acudió a Twitter para mostrar cierta disconformidad en cómo habían sucedido las cosas. «Soy un defensor de la regla, pero si una decisión es cambiada y no muestran la repetición que lo justifica junto con una explicación entonces va a haber problemas. Desde los ángulos que vimos en el pabellón parecía un robo limpio pero con contacto corporal primero. Los aficionados de nuestro pabellón no tenían ni idea de porqué se anulaba la falta. Así no es como debería funcionar».
Los destacados de la noche
Damian Lillard anotó 26 de sus 28 puntos en la segunda mitad, incluida la canasta que pondría por delante a los suyos a 25 segundos para el final. Por su parte, su compañero C.J. McCollum lograría su tope anotador del curso con 35 tantos, mientras que Rodney Hood completó el trío de anotadores de importancia con 20 puntos.
En los Mavericks, Kristaps Porzingis lideró la ofensiva con 32 puntos, 9 rebotes y 5 asistencias, y Luka Doncic se quedó a las puertas de un nuevo triple-doble con 29 puntos, 12 rebotes, 9 asistencias y 3 robos de balón acompañados de 8 de 22 en lanzamientos de campo, incluyendo 2 de 11 en triples. El esloveno no terminó contento ya que reconoció haberse equivocado al final del encuentro abusando del tiro exterior.
«Perdí el partido yo. Mala elección en los tiros», comentó Doncic. «Estaban en bonus, tenía que haber penetrado».
(Fotografía de portada: Ronald Martinez/Getty Images)