El veterano técnico señala que en estos es una opción mucho mejor hacerse cargo del banquillo de Brooklyn
En Nueva York han colgado dos carteles de ‘se busca entrenador’. Uno de ellos luce en Manhattan con el reclamo de conseguir ser quien levante a un Madison Square Garden que lleva demasiados años recibiendo golpes. Para contemplar el otro hay que cruzar un mítico puente y poner los pies en Brooklyn, donde el anuncio señala en rojo: ‘El único objetivo es el anillo’.
El futuro inmediato de dos banquillos tan cercanos geográficamente como alejados en contexto es uno de los temas de conversación que se mantienen vivos mientras la crisis sanitaria del coronavirus copa portadas. En los Knicks despidieron a David Fizdale, un adiós que hasta cierto punto recibió aplausos. En los Nets prescindieron de Kenny Atkinson; aquí hubo menos jolgorio al entender que había hecho un gran trabajo.
Sea como fuere, son dos trabajos vacantes y justo por ellos fue cuestionado en ESPN radio Stan Van Gundy. El veterano entrenador, quien lleva alejado de los banquillos desde que dejase los Detroit Pistons en mayo de 2018, empieza por descartar cualquier opción de entrenar a los Knicks por varias razones.
«Todo lo que he visto los últimos años alrededor y dentro de esa organización me dice que es extremadamente disfuncional», explica antes de aclarar que el hecho de que su hermano Jeff los haya entrenado hace años es otro motivo para decir ‘no’ a una hipotética oferta de los de La Gran Manzana. «No estoy interesado en los New York Knicks. No. Hay una historia familiar con ese equipo».
¿Y qué pasaría si los que descuelgan el teléfono son los vecinos de Brooklyn? Pues la historia cambiaría notablemente. Van Gundy prácticamente se ofrece para entrenar a los Nets en caso de que esa posibilidad se diese. «De los dos, los Nets son el mejor trabajo. No existen dudas sobre eso en este momento. La organización ha sido más estable. Han ganado más partidos. Tienen más talento», sentencia.
Los datos dan la razón a Van Gundy. En los Knicks se espera una nueva revolución de plantilla que necesitará de paciencia y buen trabajo para que funcione. En los Nets, con Kyrie Irving y Kevin Durant previsiblemente sanos para la temporada 2020-21, la perspectiva es la de ir a por todo desde el primer día. Dos retos opuestos.
(Fotografía de Kevin C. Cox/Getty Images)