Parece que O.J. Mayo va a tener otra oportunidad laboral justo cuando daba la sensación que el ocaso había llegado para su carrera, a pesar de tener solamente 32 años. Y es que el escolta está muy cerca de enrolarse en la liga china, concretamente en las filas de los Liaoning Flying Leopards.
Ahora mismo todo queda pendiente de que pase el reconocimiento médico clásico, así como la cuarentena preventiva en la que se encuentra inmerso. Este procedimiento está siendo seguido con cualquier ciudadano que llegue al país asiático con el objetivo de controlar que, en ningún momento de los 14 días de confinamiento, sufre síntomas relacionados con el coronavirus. Después de superar la cuarentena, Mayo necesitará obtener la autorización médica final, además de contar con la aprobación de la documentación oficial que pide la competición china de baloncesto para poder jugar.
Evidentemente, la liga china se encuentra parada. Las autoridades han decidido volver a posponer su reanudación, la cual ahora mismo sigue sin una fecha clara. Sin embargo, la llegada de Mayo supone un pequeño atisbo para la esperanza profesional del jugador. Estuvo durante ocho años en la NBA, época en la que promedió 13,8 puntos, 3,1 rebotes y 2,9 puntos. El 1 de julio de 2016, Mayo fue descalificado de la liga norteamericana por violar el programa antidrogas y, desde entonces, ha ido probando fortuna en equipos de Europa y Asia. De hecho, no se trata de la primera vez que Mayo compite en China, ya que el curso pasado también jugó en su segunda división, la NBL.
(Fotografía de portada de Kevin C. Cox/Getty Images).