La participación de Danny Green en el tercer duelo de la serie entre 76ers y Hawks fue bastante reducida. El alero tuvo que poner rumbo a vestuarios antes de que transcurriesen tres minutos de partido por culpa de una lesión en su pantorrilla derecha, dolencia que le impidió regresar al choque y que pone en duda su situación para los próximos encuentros. La franquicia le someterá a una resonancia a lo largo de la jornada del sábado, tal como informa el periodista de ESPN Dave McMenamin, prueba que esperan que les ayude a determinar el periodo de baja del jugador.
Green, pese a no estar firmando una gran serie a nivel de tiro exterior (1/9 en triples), sigue siendo un arma importante en el ataque de Philadelphia, y su mera presencia en pista ayuda a abrir unos espacios muy necesarios. Los de Pensilvania no están precisamente escasos de hombres en su posición, pero sin duda sería una gran noticia que todo quedase en un pequeño susto de cara a mantener la buena dinámica de la temporada.
«El resto de jugadores tienen que dar un paso adelante» aseguró Doc Rivers. «No estoy descartando a Danny del todo, pero prácticamente sí. Dudo mucho que pueda jugar el siguiente partido»
Aunque fue Matisse Thybulle quien entró a pista cuando Green tuvo que salir, fue Furkan Korkmaz quien arrancó en su lugar en la segunda mitad y quien más minutos ganó con respecto a lo que es habitual. Esto tiene bastante sentido, ya que el turco es el mejor suplente de los 76ers en cuanto a tiro exterior y apertura de espacios, y sería razonable que arrancara el cuarto partido como titular. No obstante, habrá que esperar a los resultados de las pruebas para empezar a especular con una cierta base.
(Fotografía de portada: Kevin C. Cox/Getty Images)