En las últimas horas del pasado cierre de mercado, Los Angeles Lakers se plantearon la opción de traspasar a Russell Westbrook por John Wall. Dicha operación suponía dar a cambio la única elección de primera ronda del draft que los angelinos tenían en su haber, la de 2027. Esto provocó que la franquicia nunca insistiese en un movimiento que habría puesto su futuro en jaque a cambio de un dudoso beneficio a corto plazo. Los rumores entonces apuntaban a que los Lakers esperarían a tener habilitado el traspaso de su primera ronda de 2029 para poder sacar algo más en la cacareada salida de Wetsbrook. No obstante, cuenta Jovan Buha en The Athletic que es prioritario mantener ambas elecciones durante la siguiente offseason.
El periodista añade que cabe la posibilidad de un cambio de opinión siempre y cuando el movimiento involucre librarse del salario de Russ. Los Lakers tienen poco margen de maniobra para construir un equipo que vuelva a aspirar al anillo de la mano de James y Davis. Este se estrecharía más si cabe en caso de restringir el movimiento de sus elecciones futuras. Ahora mismo, solo LeBron, AD, Russ, Horton-Tucker y Kendrick Nunn tienen contrato garantizado para la 2022-23. Aunque cabe esperar que ejecuten las extensiones de Johnson, Gabriel y Reaves. Aun con esta escasez de efectivos, los grandes contratos evitan que puedan asumir la llegada de jugosos agentes libres. Si pretenden ahorrarse esas rondas, mejorar la plantilla pasa por desprenderse de algunos activos medianamente valiosos como Talen Horton-Tucker o Kendrick Nunn, si es que este último vuelve a estar sano algún día.
(Fotografía de portada de Jamie Schwaberow/Getty Images)