«La gente normal mantiene el mundo en marcha, pero los que se atreven a ser diferentes nos llevan al mañana. Tomé la decisión de aceptar mi opción. Nos vemos en otoño».
Con esas palabras ha anunciado Kyrie Irving su continuidad en Brooklyn Nets. El base, quien parecía decidido a abandonar la organización neoyorquina, finalmente ha entendido que su mejor opción era la de aceptar su player option por valor de 37 millones de dólares, la cual le une a los Nets hasta verano de 2023; informa Shams Charania de The Athletic.
Lo cierto es que los acontecimientos se han precipitado en los últimos días. Por un lado los Nets dieron libertad a Irving para buscar un equipo con el que cerrar un sign-and-trade; por otro fue el propio jugador el que vio que era un escenario imposible al ser los Lakers el único interesado de la lista de equipos a los que deseaba salir. Según señala Adrian Wojnarowski de ESPN, es este contexto el que le ha empujado a hacer efectiva su opción de jugador.
Si bien aún podría salir traspasado, este movimiento apunta –más escuchando sus palabras– a que se compromete a un último intento de campeonato junto a Kevin Durant, quien por su lado no veía nada clara su continuidad en el equipo si Irving decidía marcharse. Finalmente seguirán juntos (por ahora).
Volviendo a la situación de Kyrie, se abren nuevos escenarios de presente y futuro. Una vez sea oficial su continuidad, seguirá siendo elegible para una extensión a largo plazo con los Nets hasta el próximo 30 de junio; es decir, si la temporada va bien y crean una buena química, podría comprometerse de nuevo con ellos. De no ser así, podría salir traspasado a mitad de temporada o, en última instancia, firmar como agente libre sin restricciones por otra franquicia en verano de 2023.
Más allá de la polémica por negarse a la vacunación contra el coronavirus y el consiguiente perjuicio personal (no poder jugar y perder hasta 17 millones de dólares), la realidad es que cuando estuvo en pista el curso pasado (fueron 29 partidos) demostró que sigue siendo uno de los mayores talentos de la NBA. Para ser exactos promedió 27,4 puntos, 5,8 asistencias y 4,4 rebotes, llegando a firmar un partido de 60 puntos contra los Orlando Magic.
¿El mejor escenario para Brooklyn?
Así lo parece. Perder a Irving a cambio de nada hubiese sido un golpe duro, ya no solo por su adiós, sino porque este podría haber llegado acompañado del de Kevin Durant. Ahora parece que las aguas se calman. KD está firmado a largo plazo, un Irving centrado es un jugador maravilloso y Ben Simmons espera para demostrar a partir de octubre que puede ser pieza esencial de un equipo campeón. Quizás esta fórmula dure un solo año, pero entre probar suerte con ella o vivir la desintegración del equipo, parece obvio que los Nets preferirían lo primero.
(Fotografía de Al Bello/Getty Images)