De forma (no tan) silenciosa, la NBA se acerca a una inminente expansión que dará la bienvenida a dos nuevos equipos a la liga esta misma década. Casi con total seguridad. Las ciudades candidatables en los Estados Unidos son de sobra conocidas. Sin embargo, a Seattle y Las Vegas a menudo se añade un tercer destino más exótico: Ciudad de México.
La capital del país norteamericano es la principal urbe NBA fuera de Canadá y el propia Estados Unidos. Además de dar cobijo a los Capitanes de la G League, allí la liga no falla a su cita anual con los Global Games desde 1993. Este mismo sábado fueron los Miami Heat y los Washington Wizards quienes disputaron su partido de liga regular en tierras mexicanas. A este respecto se personó, como siempre, Adam Silver, que volvió a discutir la cuestión de la expansión con menos optimismo que en años anteriores. «Siendo realistas, es muy poco probable que Ciudad de México adelante a las candidaturas estadounidenses que todos conocéis», pronunció el comisionado.
Obviamente, esto no lapida el deseo de la Liga de contar con una franquicia en el DF, pero sí calma un poco las expectativas. «De todas formas, creo que cuando de verdad nos pongamos a valorar las opciones de forma oficial, podremos discernir hasta que punto el proyecto mexicano es viable», continúa. «En cierto modo, Ciudad de México podría ser la mejor opción, una ciudad de 22 millones de personas en un país de 130 millones. No solo hablando de negocios, sino en cuanto a generar mayor interés y entusiasmo por el juego. Quién sabe. No creo que nadie esperase una mudanza a Oklahoma City cuando sucedió».
(Fotografía de portada de Manuel Velasquez/Getty Images)