Jokic y Murray salvan a los Nuggets en Nueva Orleans

Con 27 puntos cada uno, las dos estrellas de Denver lideraron el ajustado triunfo ante unos combativos Pelicans.

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Por Aitor Darias

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Los Nuggets han estado a punto de llevarse un susto en su vista al Smoothie King Center. Recuperando efectivos tras un inicio de curso con no menos bajas que la batalla de Stalingrado, los Pelicans empiezan a ser un equipo más peligroso de lo que dice la clasificación, y así han podido comprobarlo los de Colorado en un choque en el que han estado varias veces contra las cuerdas. De hecho, los campeones de 2023 tuvieron que remontar 17 puntos y aguantar el tipo en una prórroga, pero han acabado imponiéndose por 129-132 en el enésimo ejercicio de supervivencia de la temporada para hacerse con su 15ª victoria del curso.

El 91-74 en el marcador fue el primer toque serio de atención para los visitantes, obligados a reaccionar en los poco más de 13 minutos que quedaban por delante. Con un espectacular Trey Murphy, que sumó 21 puntos en los tres primeros cuartos pero se diluyó en el tramo final, la aportación desde el banquillo de Jordan Hawkins, máximo anotar local con 25 tantos, y la dirección de C.J. McCollum y Dejounte Murray, que se combinaron para un total de 24 asistencias, los de Green dominaron el choque a base de empezar a mostrar atisbos de lo que este equipo podría haber sido incluso sin Ingram ni Zion. El dominio fue claro prácticamente desde el inicio y a ratos parecía que el triunfo iba a quedarse en Luisiana, pero, tirando de la habitual épica, Denver tenía aún cosas que decir.

Jokic y Murray al rescate

La respuesta fue rápida y eficaz, y, lo que es menos habitual, bastante coral. Denver comenzó a recortar distancias tan pronto como arrancó el cuarto periodo a pesar de que Nikola Jokic se encontraba en el banquillo, y una vez que estuvo de vuelta en pista se encomendaron a él para finalizar un parcial de 17-34 que acabó en pocos minutos con la ventaja local. Y entre él y Murray, líderes del equipo con 27 tantos cada uno, se encargaron de retomar la delantera.

Pero el peligro no había pasado ni mucho menos. C.J. McCollum estaba con ganas de fiesta y devolvió la delantera a los locales con un triple, obligando a Jamal a ponerse su capa de héroe en el clutch curtida en mil batallas para, con un lanzamiento de media distancia, poner el 119-119 a falta de 9 segundos para el final. Marcador que, una vez que McCollum falló el que habría sido el triple de la victoria, envió el duelo a la prórroga.

En ella, volvió a ser el dúo estelar el encargado de sellar el triunfo, sumando entre ambos 11 de los 13 puntos visitantes. Jokic abrió la veda con tres canastas consecutivas en el poste, luego redondeó su triple-doble al ponerle un alley-oop a Gordon en la que fue su 10ª asistencia, y Murray tomó el relevo para sentenciar el choque con una canasta en la pintura y un par de tiros libres. Esta vez no hubo opción para los Pelicans, que se quedaron a las puertas de la sorpresa pero que, con algo más de perspectiva, quizás incluso valoren positivamente la derrota en una temporada que ya no tiene más objetivos que el draft de 2025.

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