Dicen que si estás tres arriba a falta de una posesión, lo mejor que puedes hacer es cometer falta personal. En ningún caso, eso sí, de la forma en que lo hicieron los Bucks.
Con 111-114 en el marcador y 3,9 segundos para el final, los Pacers sacaron de banda confiando en encontrar un triple con el que llevar el choque a la prórroga. Y sin embargo, cuando Tyrese Haliburton recibió el balón, lanzó como buenamente pudo, y oyó el silbato señalando falta de Giannis, el ánimo del Gainbridge Fieldhouse empezó a cambiar. Todo milésimas antes de estallar al ver el balón entrar en el aro.
Tyrese no perdonó el tiro libre conseguido y culminó el 3+1 para dar a Indiana un triunfo que rozó lo milagroso y que compensó una noche en la que perdonaron al menos una decena de triples liberados. Pero a la hora de la verdad, el universo estuvo de su lado.
(Fotografía de portada: Trevor Ruszkowski-Imagn Images)
