Ayer fue un día muy feliz para Damian Lillard y su familia. El jugador se presentó en las oficinas de los Portland Trail Blazers con sus tres hijos para firmar su nuevo contrato con la franquicia que siente como suya. Es esa la parte más relevante de su regreso en lo personal, volver a estar cerca de los suyos. Un matiz que ha afectado más de lo aparente a su periplo en Milwaukee.
«Solo saber que voy a volver a casa con mis hijos, jugar para los Trail Blazers, conducir por las mismas calles por las que he conducido durante toda mi adultez, regresar con toda mi familia y amigos en Portland», cuenta en su primer contacto con la prensa. «Todo eso cuenta. No esperaba que se diese tan pronto».
«La ciudad de Portland y la organización son una parte muy importante en mi vida. Fue así durante los 11 primeros años de mi carrera y lo seguirá siendo», continuaba. «Es todo orgánico, nunca he tenido que forzar ninguna adaptación».
Lillard formó en rueda de prensa junto a Chauncey Billups y Joe Cronin. Con los que ya tiene relación. El que será su nuevo técnico no tardó en bromear. «Le he dicho que este año va a ser el asistente mejor pagado de la historia», ironizaba Billups con el hecho de que Lillard estará fuera todo el curso por su lesión de Aquiles. «Le haré trabajar todos los días».
¿Cuándo volverá Lillard de la lesión?
El base también ha hablado sobre su lesión y los periodos de recuperación después de que Cronin indicase que se van a tomar todo el tiempo necesario. Lo que implica paciencia. «Mi orgullo me llevaría a pensar diferente, pero creo que con la edad te vuelves más sabio», ha dicho Lillard. «Como ha dicho Joe, será lo mejor tomarse todo el tiempo que sea necesario para asegurar que estoy bien».
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