Anthony Davis explica sus roces con el puesto de cinco y aumento de peso

Anthony Davis explica por enésima vez que prefiere partir como cuatro y analiza su subida de peso.

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Por David Sánchez

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Anthony Davis no quiere jugar como único pívot. Una sentencia que ha quedado más que clara desde que La Ceja recalase en Los Angeles Lakers y que este año se ha encargado de volver a repetir. En principio, no tendría que tener problemas en Dallas, donde ya figuran Dereck Lively II y Daniel Gafford como pívots puros. Aun así, se ha esforzado en explicar por qué prefiere desempeñar las labores de ala-pívot.

«Nunca ha sido cuestión de elegir entre el cuatro o el cinco. Es sobre todo un asunto de jugar como cinco durante todo el partido y toda la temporada», cuenta Davis a FOX. «Es bastante más carga física para tu cuerpo y no lo hice hasta mi segunda temporada en Los Angeles. Mi primer año teníamos a Dwight [Howard] y JaVale [McGee] y en New Orleans siempre jugué junto a un cinco. Es a lo que estoy acostumbrado y siento que soy mejor en esa posición».

Probablemente Davis tenga razón al apuntar que, a nivel individual, su mejor posición es el cuatro. Sin embargo, en un baloncesto en el que el espacio toma tanta importancia, colocarle de cinco es un arma demasiado poderosa a nivel colectivo. Tanto en defensa como en ataque. «Claro que puedo jugar momentos en el cinco. Igual en playoff. Hago lo necesario para ganar y sé que a veces es el mejor emparejamiento, pero para una temporada completa, prefiero el cuatro».

La polémica con el peso de Anthony Davis

Curiosamente, estas declaraciones vienen acompañadas de una percepción sonada sobre su aumento de peso en el verano. Y es que, según las mediciones oficiales de los Mavericks, Davis habría ganado 6 kilos durante el verano. Un cambio más enfocado a jugar cerca del hierro que para alimentar su versión más ‘alerizada’. Él lo ha explicado apuntando su tendencia respecto al peso a lo largo de la temporada.

«Me siento bien. Normalmente llego entre los 115 y 117 kilos. Nunca quiero llegar en mi peso de juego, porque después pierdo peso durante la temporada y me siento pequeño. Pierdo cuatro o cinco kilos con mucha rapidez», apunta.

(Fotografía de portada de Jerome Miron-Imagn Images)

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