Segundo partido, segunda victoria para los renovados Milwaukee Bucks. Y si la de la noche inaugural llegó de forma plácida ante los Wizards, esta ha llegado en una sufrida batalla en la frontera norte. Los de Doc Rivers se han impuesto en Toronto por 116-122 en un encuentro muy físico de esos que tanto se les atragantaban la temporada pasada, pero para los que esta vez sí parece que tienen las armas necesarias.
Y eso que los Raptors no lo pusieron nada fácil. Usando su tamaño y longitud, los de Rajakovic plantearon una defensa muy agresiva sobre balón destinada a entorpecer todo lo posible el ataque rival y generarse oportunidades en transición, una defensa que les permitió marcar el ritmo en la primera mitad. Fueron momentos de decisiones precipitadas por influencia de la defensa, de pérdidas y de caos, un caos en el que los canadienses se movieron mejor. Pero al que Milwaukee puso freno tras el descanso.
Giannis encuentra un socio
Giannis Antetokounmpo, con su dominio y poderío en la pintura, fue fundamental en ese sentido, bajando las revoluciones locales con su capacidad para llegar al aro y sumar una vez tras otra. Con 31 puntos, 20 rebotes y 7 asistencias, es imposible no referirse a él como el principal artífice del triunfo visitante, pero es también imposible quitar un solo ápice de responsabilidad a la irrupción de Cole Anthony.
Con Kevin Porter Jr. de baja, el rol de principal organizador de los Bucks había quedado vacante, y aunque Ryan Rollins ocupó el puesto de titular fue el ex de los Magic el que acabó ejerciendo a la hora de la verdad. Y lo hizo por méritos propios. En una absoluta exhibición, acabó sumando en prácticamente todos los aspectos, y dio a los fans de Milwaukee una buena muestra de lo que puede llegar a aportar en noches inspiradas.
Cole Anthony balled out off the bench tonight.
— Milwaukee Bucks (@Bucks) October 25, 2025
23 PTS | 7 AST | 4 REB | 2 STL | 64% FG pic.twitter.com/Kaf9vciWwr
Anthony terminó con 23 puntos, 16 de ellos anotados en la segunda mitad, pero hizo mucho más que anotar. Con 7 asistencias, se encargó también de generar para sus compañeros; con 4 rebotes y 2 robos, luchó cada balón suelto y consiguió varias posesiones extra para los suyos; y, aunque no hay estadística que lo refleje, su capacidad para manejar y asegurar el balón dio a los de Wisconsin la estabilidad que les había faltado en la primera mitad. La misma que los acabó guiando al triunfo.
Toronto, de la mano de Brandon Ingram y sus 29 tantos y los 20 y 19 que aportaron R.J. Barrett e Immanuel Quickley respectivamente, llegó pese a todo al final con opciones, pero, a diferencia de los Bucks, no encontró a ese hombre a quien fiar las posesiones vitales. Y así, entre errores en el tiro libre, pérdidas evitables y buenas defensas visitantes, se les acabó escapando un choque en el que se confirmaron como un equipo muy peleón. Pero también como uno con ciertas carencias.
(Fotografía de portada: Gerry Angus-Imagn Images)





