Al Jefferson se muestra optimista con su estado físico y espera poder jugar esta noche en el primer partido de la temporada ante los Houston Rockets, informa el Charlotte Observer.
El pívot cayó lesionado a principios de la pretemporada, cuando pisó el pie de Chris Bosh durante un partido amistoso. Jefferson ha participado en varios entrenamientos junto a sus compañeros, sin embargo desde la franquicia se muestran cautos con su estado físico.
«Hizo algún tipo de contacto, algún cinco contra cinco, pero no todo», admitió el entrenador Steve Clifford.
Pese a que no se encuentra al cien por cien, en la cabeza de Jefferson no cabe otra posibilidad que la de enfrentarse esta próxima madrugada a Dwight Howard.
