La franquicia
Tras una inesperada presencia en playoffs, las cosas se ven de otro modo de Orlando. Un equipo que parecía no ir a ningún lado ha comenzado por fin a dar señales de vida, estableciendo unas bases competitivas a las que debe dar continuidad en lo que van llegando los más jóvenes. Los Magic cuentan con varias piezas de un potencial inmenso que aún está sin explotar y que deben ser el futuro de la franquicia, pero no por ello se niegan a comprobar hasta dónde puede llegar el proyecto actual. La idea parece clara: seguir compitiendo mientras el futuro se va convirtiendo en presente.
El problema es que estos jugadores jóvenes están rodeados de una cierta incertidumbre. Jonathan Isaac sí que ha dado destellos de gran jugador, pero a Mo Bamba aún le falta mucho trabajo y Markelle Fultz, mermado por las lesiones y devorado por la presión mediática, ha comenzado a convertirse en una suerte de incógnita. ¿Posibilidades? Infinitas. Pero no es una mano con la que uno se atreva a hacer un all-in.
Movimientos
«Mejor no cambiar aquello que funciona» ha sido la premisa por la que se ha regido el verano de los Magic. El grueso de la plantilla actual es esencialmente el mismo que cerró el curso 18/19, a excepción de una incorporación a la que ahora llegaremos. Así, Nikola Vucevic, Terrence Ross, Michael Carter-Williams y Khem Birch renovaron con los de Florida, asegurando, para bien o para mal, la continuidad del proyecto.
El ya mencionado fichaje es el de Al-Farouq Aminu, un jugador que se caracteriza por su excelente defensa y por la facilidad para encajar que le aporta su versatilidad. Llegó además por un salario relativamente bajo (29×3), lo que hace que resulte incluso sorprendente que otras franquicias con más aspiraciones no se lanzaran a por él. Es sin duda un buen complemento para Orlando, pues permitirá a Clifford seguir haciendo que el equipo crezca a base de fortaleza defensiva.
Además, escogieron a Chuma Okeke en el puesto número 16 del Draft, aunque de momento no ha firmado con la franquicia y parece que podría arrancar el año en la G League.
Fichajes frustrados
La idea era renovar a los expirings y se ha cumplido. Bajo esa premisa, cuesta encontrar alguien a quien incluir en este apartado. Se llegó a hablar de un posible interés de los Magic en D’Angelo Russell, pero jamás fueron de los equipos más mencionados y desde luego no parece que pujaran fuerte por él.
Plantilla
Bases: Markell Fultz, D.J. Augustin, Michael Carter-Williams.
Escoltas: Evan Fournier, Terrence Ross.
Aleros: Jonathan Isaac, Al-Farouq Aminu, Wesley Iwundu, Melvin Frazier.
Ala-pívots: Aaron Gordon, Khem Birch.
Pívots: Nikola Vucevic, Mo Bamba.
Directiva y cuerpo técnico
John Hammond, que se hizo con el puesto de general manager en 2017, puso fin el pasado verano a la breve etapa de Frank Vogel en Orlando para dar las riendas del equipo a Steve Clifford, y de momento parece que la decisión ha sido positiva. En su primer año, el técnico fue poco a poco asentando sus ideas, y logró que el equipo fuese de menos a más hasta devolverlo a playoffs por primera vez desde 2012. Ahora, con el factor sorpresa ya eliminado, deberá demostrar que puede seguir con dicha mejoría e ir desarrollando a las piezas más jóvenes.
Objetivos
La idea con la que debe salir Orlando es la de repetir presencia en la postemporada. No obstante, si tenemos en cuenta que la generación con más potencial es la de los más jóvenes, probablemente sea más importante empezar a ver atisbos de crecimiento que cualquier otra cosa. De nada sirve volver a pisar los playoffs y estar en casa cinco partidos después si esto no va acompañado de un cierto desarrollo de los menos veteranos. Estar de nuevo entre los ocho primeros ayudaría a consolidar a la franquicia en un puesto relativamente respetable, pero ver a Fultz jugar como sabe y empezar a ilusionar, a Bamba dar señales de dominio y a Isaac seguir creciendo sería el verdadero triunfo si se pone la mirada más allá de junio de 2020 y si de verdad se quieren buscar cotas más altas.
(Fotografía de portada: Steve Dykes/Getty Images)