Casi aprovechando el instante en el que su némesis esperaba diagnóstico en urgencias, Cleveland Cavaliers ha aprovechado para reforzar su plantilla y afilar todavía más los muros de su territorio conquistado. Los Cavs ahora mismo son mucho mejor equipo que el que ganó el anillo la temporada pasada. Ha coincidido el rearme de Ohio con la lesión de Kevin Durant en Golden State. Y, con esta actualizada situación, parece claro que los Cavs poseen la mejor plantilla de la NBA.
Repasamos a continuación la adelantada plantilla de trabajadores que han juntado los recursos humanos —mención especial a LeBron como general manager en la sombra— de Cleveland. Lo cierto es que el roster que dirige Tyronn Lue es un escándalo. Lo analizamos.
Bases
- Kyrie Irving, Deron Williams y Kay Felder.
Uno de los cuatro-cinco mejores bases de la NBA —Stephen Curry, Russell Westbrook, Isaiah Thomas o Chris Paul y poco más al nivel de Kyrie Irving— además de, recién reclutado, un reserva de lujo en la posición de point guard. Ciertamente, Deron Williams no retiene demasiado las costumbres mormonas que le llevaron a ser una estrella en Utah; sin embargo como suplente se inyecta perfectamente en las venas ganadoras de Cleveland. Descarga a LeBron James de la tediosa labor de dirigir y asistir en todas las jugadas, además de suponer una amenaza (más) exterior si la defensa rival se encierra para proteger el aro. El joven Kay Felder queda en plano más secundario ahora mismo.
Escoltas
- Kyle Korver, J.R. Smith, Iman Shumpert y DeAndre Liggins.
Otra de las posiciones reforzadas con matrícula, la de escolta. No es casualidad que los Cavaliers sean el segundo equipo de la NBA con mejor porcentaje de triples (38,8, mejorados por Spurs). También son segundos en total anotado e intentado desde beyond the arc (solo superados por Houston). La plantilla ha reunido en torno a LeBron una envidiable columna de rifles dispuestos a disparar cuando hay mínima ventaja espacial. Como en el caso de Kyle Korver. J.R. Smith está fuera hasta playoffs pero también exprime esta habilidad con precisión suiza. En postemporada estarán ambos. Y siempre queda Iman Shumpert para amenazar con tiro desde fuera al tiempo que ofertar tensión en defensa.
Aleros
- LeBron James, Richard Jefferson, James Jones.
Soltamos este enunciado hace unas semanas e insistimos: la afirmación de que LeBron es el mejor puede ser discutible, nunca incorrecta. Poco más que añadir del gran dominador de la liga en la última década. Además este curso asiste más que nunca (8,9) y se preocupa de involucrar al máximo hasta a las líneas pintadas del Quicken Loans Arena. A él se unen Richard Jefferson, James Jones y también Korver, que puede actuar como llegado el caso.
Ala-pívots
- Kevin Love, Channing Frye, Derrick Williams.
Sin Kevin Love, lesionado las próximas semanas, los Cavs se han reforzado con Derrick Williams. De hecho, con la versión más estilizada del power forward en bastante tiempo. De inicio, está Channing Frye para intimidar con sus triples —ya se sabe, los espacios que crea James—. Y cuando toque abusar del small ball hasta LeBron James se arremanga para ascender una posición en la pizarra de Tyronn Lue.
Pívots
- Tristan Thompson, Andrew Bogut.
La brillante contratación de Andrew Bogut (¿kryptonita frente a Golden State?) eleva sobremanera las líneas interiores de Cleveland. A uno de los mejores reboteadores de la competición se une un serio defensor, intimidador, también aliado de los rechaces y conocedor del juego. Tener a Bogut como segundo center es un lujo que solo los Cavaliers y LeBron podían permitirse. La pintura y la plantilla quedan redondas.
Recapitulando, Cleveland Cavaliers posee la nómina más completa de toda la liga. Una virguería directiva posible gracias siempre a la mediación de LeBron James en teléfonos y despachos. Y dependiendo de cómo avancen los Warriors y Kevin Durant, el favoritismo al título puede ir virando a la exclusividad plena de los Cavs. La plantilla, de verdad, da para varios anillos.