Este lunes, los Utah Jazz coronaron una semana inmaculada con una importante victoria ante los Philadelphia 76ers. Un partido que sirvió para cerrar una pequeña serie en la que los de Salt Lake City se enfrentaron a cinco de los mejores equipos de la Conferencia Este: Indiana Pacers, Boston Celtics, Miami Heat, Milwaukee Bucks y los propios 76ers. Cinco duelos solventados con éxito con una ventaja media de 13 puntos.
El término ‘victoria’ se ha convertido en una rutina en el estado de Utah. 19 en los últimos 20 partidos. 23 en total –por solo cinco derrotas– para superar el mejor inicio de temporada de la historia de la franquicia, en manos de aquellos casi perfectos Jazz de John Stockton y Karl Malone.
Un dominio construido sobre un rendimiento colectivo y continuista que ha sido, desde el traslado a su actual destino, la máxima premisa de la organización. Más de dos décadas después de aquellas dos Finales consecutivas vuelven a recoger los frutos y amenazan la aparente hegemonía de la Conferencia Oeste en manos del dúo angelino.