Retrocedamos en el tiempo hasta el 20 de junio de 2019. Aquel día, los Suns traspasaron a T.J. Warren y la selección número 32 del draft a Indiana. Los de Arizona recibieron a cambio una determinada cantidad de dinero.
La franquicia de Arizona había seleccionado a Warren en la 14ª posición del draft de 2014. El producto de la Universidad Estatal de Carolina del Norte aterrizaba en la NBA tras ser elegido Jugador del Año de la Atlantic Coast Conference. Su palmarés lo completaba con la distinción al máximo anotador de su conferencia y el tercero de toda la NCAA. “Es el anotador más talentoso de la clase”, lo definiría el analista de Draft Express Mike Schmitz. Puntos y más puntos. Precisamente lo que necesitaban unos Suns a la deriva sin resto alguno de la etapa de Steve Nash.