En los últimos días, cada fichaje de los Lakers ha generado un revuelo tremendo en las redes sociales. Un revuelo en el que yo mismo he participado porque, sinceramente, considero que, tras el varapalo que supuso el «no» de Kawhi y su viaje de vuelta a Los Ángeles para jugar en los Clippers junto a Paul George (ambos de la zona de L.A.; ambos objetivos de los Lakers), han reaccionado bastante, bastante bien. Pero hasta ahí, claro.
El miércoles pasado, hace justo una semana, publicamos un vídeo sobre los ‘perdedores’ de la Agencia Libre en drafteados. Un vídeo en el que eran protagonistas los Knicks, porque no han conseguido el pez o los peces gordos que querían mientras los Nets se ponían las botas; los Raptors, porque se ha marchado Kawhi y con él sus opciones de repetir título; los Warriors, por la salida de Durant; y, para sorpresa de la gente (al parecer…), también Los Angeles Lakers.
‘Perdedores’ por…
¿Por qué considero que los Lakers han ‘perdido’ en esta Agencia Libre? No es una ciencia exacta ni mucho menos, pero os voy a dar mi opinión.
Con LeBron, Anthony Davis y Kyle Kuzma en plantilla, los Lakers decidieron que su objetivo en la Agencia Libre era Kawhi. Y esperaron hasta el final, siendo uno de los tres finalistas con opciones reales en la decisión del dos veces MVP de las Finales. Tras rozar con los dedos un fichaje que hubiera supuesto un antes y un después en la historia de la NBA (tres top-5/top-7 de la liga en el mismo equipo creo que no ha pasado nunca) y que hubiera colocado a la franquicia en una posición de hiperfavoritismo/anillo o fracaso para los próximos 2-3 años como mínimo, han visto cómo Kawhi se daba la vuelta y elegía, junto a Paul George, a sus vecinos los Clippers.
El ‘diminuto’ equipo de al lado que no sabe lo que es jugar unas Finales de Conferencia en la NBA (contra los 16 anillos de los Lakers), el hermano pequeño que nunca ha tenido rivalidad real con el mayor, ese equipo que durante tantos años había sido considerado una de las peores franquicias de la Liga… Ese equipo se acaba de llevar a dos de los más grandes objetivos de los Lakers en los últimos años y ha acabado con el hipotético hiperfavoritismo de la franquicia (la NBA 2020 parece más abierta que nunca), complicando una barbaridad sobre el papel el ansiado anillo de LeBron en Los Ángeles.
Los fichajes
Una vez aquí, un punto en el que considero que ya podemos dar a los Lakers como perdedores de la Agencia Libre, desde las oficinas angelinas se pone en marcha el plan B.
Danny Green estaba hablado (y es un fichaje fantástico), KCP pactado y lo mismo digo para JaVale. Pero más allá de esos tres primeros acuerdos, el mercado ya había cerrado el 90%/95% de los contratos importantes y lo que quedaba era lo que tenía que quedar. ¿Nos paramos un momento a analizar de verdad qué se han llevado los Lakers más allá de los nombres?
Rajon Rondo: un veteranazo de 33 años que se perdió la temporada pasada 36 partidos (jugó 29 de titular) y que solo ha conseguido disputar 70 en (ojo) una de sus últimas nueve temporadas en la NBA. Y que además mezcla regular con LeBron y Anthony Davis porque el tiro, aunque mejoró algo la temporada pasada, nunca ha sido uno de sus puntos fuertes.
Caruso: un guard de 25 años que firmó su primer acuerdo NBA en 2016 y que a día de hoy solo ha disputado un total de 62 partidos en la liga. Acabó muy bien la temporada pasada (en un equipo que ya no se jugaba nada…) y parece que su carrera va a remontar. Pero por ahora es lo que es.
Quinn Cook: tiene 26 años y lleva intentándolo en la NBA desde 2015. Hasta la temporada pasada, en la que por lesiones y plantilla los Warriors tiraron muchísimo de él (eso es a 14 minutos por partido), había disputado un total de (ojo) 47 partidos. Es un buen tirador y podría ayudar mucho si está acertado.
Avery Bradley: no sabemos qué queda del jugador que brillaba en Boston. En sus nueve años de carrera solo ha conseguido jugar 70 partidos dos veces (muchas lesiones) y en las dos últimas temporadas se ha perdido 55 duelos. El año pasado, en sus 49 partidos con los Clippers solo anotó un 33% desde el triple. Veremos si con la motivación correcta vuelve a ser el que era.
KCP: fiable físicamente, pero rendimiento completamente estancado. Un modesto e irregular 34% desde el triple y 24 minutos por partido la temporada pasada, su peor marca en la liga desde su año rookie.
Daniels: va a cumplir 28 años y hasta ahora solo ha sido jugador de segunda/tercera línea de rotación (más bien tercera) en equipos bastante malos. Un buen tirador, pero muy poco más. O nada, vamos.
Dudley: 34 años y mil batallas, no todas buenas ni bien elegidas. Es un veteranazo que defiende muchas posiciones y que reparte estopa cuando toca y cuando no. Capaz desde el triple, pero también se ha perdido 57 partidos en las dos últimas temporadas.
McGee: irregular como él solo, pero mucho más centrado tras su paso por los Warriors. Fue una de las mejores noticias de los Lakers la temporada pasada y creo que su regreso puede ser un gran acierto. Puede aprovechar bien los espacios que le regalen las defensas rivales por la presencia de LeBron y AD.
Cousins: traspasado en 2017, 48 partidos en 2018 (su mejor momento…) y el maldito tendón de Aquiles. La temporada pasada jugó 30 partidos de temporada regular a 25 minutos por noche (volvió y se volvió a lesionar) y ocho de playoffs a poco más de 15. Un día bueno y dos muy malos en su paso por Oakland. ¿Lo mejor? Pareció estar mucho más centrado y comprometido con la palabra equipo. Una incógnita absoluta de la cabeza a los pies. Podría ser una ganga (un pelotazo) si está medio buen a nivel físico.
En esta lista falta Danny Green, el mejor fichaje de estos nuevos Lakers y también el más fiable. Puede que el único verdaderamente fiable a todos los niveles. Y a todo esto hay que sumar que serán un equipo nuevo, en el que habrá que construir automatismos, silenciar egos (que no hay pocos…) y aprender a competir los unos con los otros con el paso del tiempo (Rondo, Davis y Cousins llegan con cierta ventaja en ese aspecto).
En fin, lo dicho. Creo que los Lakers han hecho un buen trabajo para cerrar la plantilla tras el varapalo. Pero más allá de Danny Green, lo que quedaba es lo que tenía que quedar. Y a partir de aquí, hay que esperar.
¿Están entre los favoritos para el anillo 2020? Por supuesto. Cualquier equipo con LeBron y Anthony Davis lo estaría. ¿Se puede considerar un éxito su agencia libre? Depende. Depende de si consideras lo que podría haber sido, lo que ellos de verdad querían (como hacemos con todo el mundo…). La realidad es que al final han salvado los muebles y han reclutado a un grupo con mucho nombre (y bastante talento), pero muchísimo más que demostrar. ¡Veremos!
(Fotografía de portada: Kevork Djansezian/Getty Images)