Se acerca la decisión más importante de su carrera.
Estamos a solo dos días del draft 2019 y a menos de dos semanas de que arranque la agencia libre más esperada de los últimos años. Con el 40% de los jugadores en el mercado (más/menos), los mercados grandes con dinero en sus arcas y los pretendientes afilando sus colmillos tras las lesiones de Kevin Durant y Klay Thompson, lo que pase en el próximo mes decidirá el mapa NBA de la temporada que viene. Y uno de los nombres más importantes es el de Kemba Walker.
El base acaba de cumplir 29 años, ha sido All-Star por tercera vez en su carrera (titular por primera), acaba de terminar el último año de un acuerdo que ha sido una ganga para los Hornets prácticamente desde que se cerró (12 millones por temporada/cuatro años) y sale al mercado con su mejor baloncesto de la mano y solo dos eliminatorias de playoffs en la mochila: dos primeras rondas en ocho años de carrera.
La pregunta es la siguiente: ¿qué opciones tiene realmente Kemba Walker?
¿220 millones?
La primera y más evidente de sus opciones es agarrar fuerte los 220 millones de supermax que le pueden ofrecer los Hornets. Si es que se los ofrecen, claro… Serían 80 millones más de lo que le podrían ofrecer los otros 29 equipos, casi 10 kilos más anuales y un quinto año de contrato que solo le pueden ofrecer ellos y que él ya ha dicho públicamente que, en su opinión, tiene mucho peso. Pero… ¿Qué pasa si no le ofrecen el supermax? ¿Qué pasa si en lugar de 220 son 190? ¿Seguiría siendo el quinto año tan importante? ¿Se sentirá Kemba menospreciado por su propia franquicia?
Todo por el anillo
La segunda opción es la segunda que más suena: llegar a un acuerdo con Los Angeles Lakers para buscar el anillo junto a LeBron y Anthony Davis. Y la línea de venta está clarísima: en Charlotte jamás vas a tener una oportunidad así. Puede que ni allí ni en ningún sitio. Puede que nunca más en toda tu carrera. Lo que ofrecen ahora los Lakers con dos monstruos en plantilla es, deportivamente, una oportunidad única.
El problema aquí sería económico. Primero porque aún no sabemos el espacio exacto que tendrán para ofrecer los Lakers y segundo por la influencia que tiene ser elegible para supermax en tu propio equipo. En LA estaríamos hablando, como muchísimo, de un acuerdo de 140 millones cuatro temporadas. Y seguramente sea menos (100-120). ¿Vale la posibilidad de ganar campeonatos más de 80-100 millones de dólares?
Lakers, pero apostando
Esta es otra opción de la que no se habla todavía mucho pero que igual gana fuerza en las próximas semanas. Si en Los Angeles no tienen para ofrecer el máximo de 140 millones, Kemba podría intentar firmar 1+1 o 2+1, cediendo pasta uno o dos años para ayudar al equipo a competir y con la promesa de un máximo en cuanto el límite salarial (que seguirá creciendo) lo permita. Si fuera en el verano de 2021, Kemba podría firmar el máximo para jugadores con 10+ años de experiencia, pero tendría ya 31 años. ¿El gran problema de esta vía? Las lesiones de Cousins (el caso más claro), Durant y Klay en año de contrato no ayudan a dejar grandes cantidades de dinero encima de la mesa. Por lo que pueda pasar…
¿Otro destino?
Se habló mucho de Nueva York en su momento, pero la lesión de Durant ha enfriado todos los rumores de pelotazo en la gran manzana. Veremos… Todo parece indicar que Kyrie jugará en Brooklyn, por lo que no tiene sentido pensar en Kemba. Y la verdad es que no hay muchos más equipos con espacio salarial y que tengan o puedan absorber al mismo tiempo a otra estrella. ¿Los Angeles Clippers? ¿Indiana Pacers?
¿Por qué nadie piensa en Indiana Pacers? Una pregunta para otro día.