Solo una reducida nómina de equipos se ha atrevido en los últimos años a hacer frente a la narrativa de juego impuesta por la NBA conocida como small-ball. Conscientes de la necesidad de añadir espaciamiento y tiro exterior a sus esquemas, las franquicias están tratando de revertir esta tendencia de forma tímida con una nueva propuesta que recupera centímetros en casi todas las posiciones.
Así, este nuevo ‘big-ball’ rompe por completo con aquellos precedentes que consistían en disponer de dos torres interiores de gran altura pero con cualidades muy similares. En su lugar, los equipos exigen jugadores de gran envergadura que, a su vez, sean capaces de cortar hacia canasta, anotar de tres, luchar el rebote, defender varias posiciones y mostrar también ciertos fundamentos en el poste o la dirección.
El curso pasado comprobamos de primera mano una interesante propuesta que nos llegó desde Cleveland, donde J.B. Bickerstaff probó en un mismo quinteto a hombres altos como Jarrett Allen, Evan Mobley y Lauri Markkanen. Lejos de generar una problemática, las distintas cualidades de cada uno conformaron un planteamiento muy interesante con resultados prometedores mientras las lesiones lo permitieron.
La salida de Markkanen rumbo a un inesperado estrellato en Salt Lake City nos privó de ver el desenlace de esta propuesta, pero otras franquicias han decidido tomar el testigo. En Minnesota, Chris Finch se encuentra batallando ferozmente por demostrar que tenía razón cuando afirmó que sabía cómo ajustar a Rudy Gobert y Karl-Anthony Towns, mientras los resultados, por el contrario, exhiben un mejor juego con quintetos pequeños y Anthony Edwards comparte públicamente su descontento.
Los resultados colectivos tampoco acompañan a los Orlando Magic, pero las sensaciones son mucho mejores que con los Timberwolves. En efecto, la última plaza de la Conferencia Este con un balance de dos victorias y ocho derrotas no debe de llevar al aficionado al engaño: los Magic están practicando un juego vistoso y dinámico que parte de su prometedor núcleo de jugadores.