Tras finalizar la Temporada Regular de la NBA 2016-17, es tiempo de playoffs. Toca analizar las eliminatorias de primera ronda para ver cómo llega cada equipo al enfrentamiento de primera ronda y quién creemos que puede ser el favorito a priori.
(2) Cleveland Cavaliers – (7) Indiana Pacers
- Cavaliers (51-31)
- Pacers (42-40)
- Enfrentamientos directos: 3-1 en Temporada Regular para Cleveland Cavaliers.
Si solamente nos atenemos a lo sucedido durante la Temporada Regular, especialmente al último tramo, se puede establecer que los protagonistas del duelo entre Cleveland e Indiana comparten un denominador común: la irregularidad. Tantos han sido los bamboleos de ambos equipos que hasta la última noche no estaban claras sus posiciones y, por tanto, carecían de la posibilidad de saber quién iba a ser el rival que iban a tener en frente.
Más extraño puede ser el caso de los Cavaliers, que han visto como el All-Star ha sido la kryptonita que se ha encargado de desarbolar el orden estructural y de resultados que imperaba en los de Ohio hasta entonces. Un 40-16 como carta de presentación para llegar al fin de semana de las estrellas; desde ahí, un paupérrimo 11-15 que no solamente ha hecho que hayan perdido el primer lugar del Este —por otro lado muy merecido en el caso de Boston—, sino que también ha diluido la potencia con la que el equipo arrasaba por una Conferencia que parecía haberse convertido en su coto de caza particular desde la vuelta de LeBron James.
En el caso de los Pacers, hace un par de semanas estaban tres partidos por debajo del 50% de victorias y su presencia en los playoffs parecía ennegrecerse con cuatro derrotas seguidas. Tomando esa pretendida irregularidad por bandera, el equipo decidió que les tocaba vivir otro mini-ciclo, pero esta vez cargado de triunfos. Cinco consecutivos, y de manera holgada todos y cada uno de ellos, para esprintar hacia la postemporada e intentar continuar esas buenas sensaciones en una serie que van a tener complicada. Lo analizamos.
LeBron, toca cambiar el chip
La situación en Cleveland se presenta confusa cuanto menos. Estamos acostumbrados a ver cómo los puestos altos de las Conferencias no prolongan en el tiempo sus baches, y tienen como norma mostrarse incontestables en casi cada aprieto en el que se les pone durante el curso. Esta vez los Cavs no llegan tan finos como siempre, pero, ey, estos son los playoffs y esta fase de la temporada es casi como un deporte que nace en paralelo cada abril y cada equipo parece transformarse cual hombre lobo al llegar la luna llena.
A LeBron se le dan muy bien los actuales Pacers. Como indica NBA.com, es el jugador del Este que más daño le ha hecho a los de Indiana en esta campaña gracias a los 32,3 puntos que ha promediado en sus cuatro duelos hasta la fecha. El alero a buen seguro va a querer quitarse todas esas dudas que se han sembrado sobre él y sobre los Cavs en estas semanas, y cuando LeBron está con el “modo competición” activado, hay pocos jugadores en la historia tan eficientes como él. Solo como dato final, LeBron está 11-0 en los encuentros de primera ronda que ha disputado en su carrera. Casi nada.
Paul George, qué bueno que viniste
Destacar a LeBron en esta eliminatoria es hablar de Paul George inmediatamente después. El emparejamiento entre ambos en pista va a ser una de las constantes de la serie y aunque esto no quiera decir que todo gire en torno a ello, lo cierto es que sí que puede llegar a marcar el devenir de lo que suceda. George ha aumentado su producción personal en marzo y abril —26,8 y 32,8 tantos, respectivamente—, y será la primera gran opción ofensiva para los de Nate McMillan. Aunque huele a que el técnico querrá que George esté igual de pendiente a la hora de minimizar el daño de LeBron en ataque, y eso puede acabar minando por mucho el físico de George cuando este quiera tener clarividencia en cancha de Cleveland. La otra opción que guardan en la recámara es tirar de recuerdos vintage y volver a poner a Lance Stephenson a defender e intentar sacar de quicio a LeBron.
Profundidad de banquillo
Aquí, a juicio del que escribe, va a estar la clave de la serie. A pesar de no haber tenido la mejor de las suertes con las lesiones, los Cavaliers tienen un fondo de armario que supera en mucho al de su rival. Y si los Pacers son capaces de detener a algunas de las primeras opciones ofensivas de Cleveland, los planes B, C y hasta Z harán su aparición para demostrar que una eliminatoria de playoffs a varios partidos, los Cavs son muy favoritos.
La gerencia de los de Ohio – y por qué no decirlo, con LeBron ejerciendo de Cicerone en todas esas peticiones – ha hecho lo que debía y han ido rellenando sus carencias con veteranía de la mano de Deron Williams, Kyle Korver y compañía. Tener esa profundidad de plantilla ha permitido que mismamente LeBron, Kyrie Irving o Kevin Love hayan podido descansar más de lo habitual en la última semana y estén frescos para el primer partido del sábado.
Indiana deberá tener otro plan para Irving, quien cada vez que ha tenido un micrófono delante se ha encargado de decir que busca otro anillo como si no hubiera un mañana. Detener al base va a ser tarea complicada para Jeff Teague, mientras que Monta Ellis va a tener que estar certero para castigar los errores de los Cavs y Myles Turner tendrá que poner su músculo encima de la mesa para ponérselo difícil en la pintura a Cleveland. Es curioso, pero aunque los Pacers no tengan el look de un equipo de élite en el triple, son los cuartos mejores de la liga con un 37% de acierto. Además, son fuertes en el tiro libre, ocupando la segunda posición.
La importancia de la defensa
LeBron se ha cansado de repetir el último mes que con una defensa así no iban a llegar muy lejos en playoffs. Y no le falta razón. Desde el sábado han de demostrar que no solamente están enchufados en ataque, sino que esa defensa que fue clave para convertirse en campeones de la NBA ha de volver a hacer su aparición. Lo más probable es que la serie ante los Pacers se decante del lado de los Cavaliers, pero si Indiana sabe aprovechar sus bazas y hacerse fuerte en el Bankers Life Fieldhouse, igual los de Tyronn Lue ven cómo el deseo de acabar en cuatro partidos se estira a uno o dos más, y eso empieza a minar la planificación de minutos y descansos que tienen reservada para su Big Three.
Pronóstico vencedor: Cavaliers 4 – Pacers 1.