Así empiezan la temporada
Proyecto recién nacido. Aunque la operación Budenholzer no ha abortado todavía, el actual proyecto no puede considerarse idéntico al de la temporada pasada en los Atlanta Hawks. Al Horford y Jeff Teague partieron, dos de los tres mejores jugadores del equipo. Por lo tanto, Atlanta no empieza de cero, sin embargo los cambios obligan a desinflar expectativas. Las dos pasadas temporadas (60-22 y 48-34) no son un espejo fiable. Aunque eso no significa que no puedan hacerlo significativamente bien este año.
Howard y el sistema Budenholzer. Una de las grandes asignaturas en las que el maestro Budenholzer más machaca es la constante movilidad de sus tutelados. Una jungla de bloqueos ciegos para terminar con tiros liberados, además de la connivencia interior para desarmar defensas jugando. Con habilidad, movimiento sin balón, pase e inteligencia. Habrá que ver cómo encaja Dwight Howard, la nueva estrella de los Hawks, en todo ese escrupuloso mejunje táctico.
Eso sí, las pulgadas y volumen de Howard pueden favorecer en gran medida los aleteos exteriores de toda la plantilla de Atlanta, incluido Paul Millsap. Fijará defensas para los bombarderos exteriores.
Pérdida de Teague y Horford. Paul Millsap fue la estrella de los Hawks en las dos últimas temporadas. No obstante, dos grandes lubricantes del sistema, aparte de Budenholzer, eran Jeff Teague y Al Horford. Su IQ y visión de juego eran, quizá, las más maduras de la plantilla con la de Millsap. Es una incógnita, pues, cómo se levantarán los Atlanta Hawks de sendas marchas. Lo que sí es de esperar es menos circulación de balón colectiva y elaboración. El nuevo año, para Kyle Korver, se antoja «muy cool«.
Secundarios. En cualquier obra de alcance medio largo en la NBA, no todo el peso de la estructura puede recaer en los pilares principales. Los arbotantes han de ser fiables también, y por eso el banquillo de Atlanta ha de estar a la altura de años anteriores. Tiago Splitter, Jarret Jack, Kris Humphries, Mike Scott o Tim Hardaway JR tendrán el papel de que la estructura no se venga abajo.
El salvaje Este. Hace dos años, los Atlanta Hawks barrieron el Este durante la temporada regular sin que ninguna mota de polvo se les atragantase. 60-22 y primer puesto de conferencia. Sin embargo, la costa atlántica se ha reforzado y llenado de espinas. Ahora, Pacers, Knicks, Bulls, Raptors, además de los Cavs, son equipos con presumible mayor potencial que Atlanta.
2017, año de renovaciones. Y quizá uno de los factores más determinantes para Atlanta este año es que la 2016-17 sea una temporada ‘maría’ antes del caos administrativo. De toda su plantilla, Schröder, Millsap, Jack, Korver, Hardaway, Humphries y Splitter finalizan contrato el verano que viene. Por ello, del resultado y aspiraciones de Atlanta podrían depender un éxodo asesino para la franquicia o la permanencia del proyecto vigente.
La plantilla
Altas: Dwight Howard (Houston), Jarret Jack (Brooklyn), Ryan Kelly (Lakers), Taurean Prince, DeAndre Bembry, Will Bynum, Malcolm Delaney.
Siguen en el equipo: Dennis Schröder, Kent Bazemore, Tim Hardaway JR, Kyle Korver, Thabo Sefolosha, Mike Scott, Paul Millsap, Kris Humphries, Walter Tavares, Tiago Splitter y Mike Muscala.
Bajas: Jeff Teague (Indiana), Kirk Hinrich (agente libre), Al Horford (Boston) y Lamar Patterson (Sacramento).
Rotación 2016-17
- Bases: Dennis Schröeder, Jarret Jack, Will Bynum y Josh Magette.
- Escoltas: Kyle Korver, Tim Hardaway JR y Malcom Delaney.
- Aleros: Kent Bazemore, Thabo Sefolosha, Taurean Prince, Matt Costello, DeAndre Bembry.
- Ala-pívots: Paul Millsap, Mike Scott, Mike Muscala, Kris Humphries.
- Pívots: Dwight Howard, Tiago Splitter, Walter Tavares.
La estrella
Paul Millsap (ala-pívot, 31 años).
Con las deserciones de veraniegas —Teague y Horford— la indiscutible estrella de los Atlanta Hawks es Millsap. Además, este año podrá dinamizar sus actividades lejos del aro gracias a la presencia de Dwight Howard, quien deberá fijar la defensa sobre el poste y liberar a sus compañeros para que manejen desde fuera.
El recién llegado
Dwight Howard (pívot, 30 años).
Dejados atrás sus alter ego de titán en Orlando y rey destronado en Houston, llega el primer Dwight Howard que jugará en casa. El pívot, otrora discípulo natural de Shaquille O’Neal, jugará a los 30 años para la ciudad en la que nació. Su rendimiento es una incógnita. Sería inesperado un deja vu con el Howard de Orlando, pero se espera de él algo más que en los últimos años con los Rockets. Hará ganar en presencia interior, defensa y rebote ofensivo, parcela en la que Atlanta estuvo a la cola (30º) de la NBA el pasado curso.
El jugador de futuro
Dennis Schröder (base, 23 años).
Hasta tal punto apuestan los Hawks por Dennis Schröder que este verano acompañaron a la salida a Jeff Teague, desde 2009 en la franqucia y desde 2011 con la dirección del juego bajo su dictamen. Así, Schröder asciende de un plumazo desde los barracones de segunda al puesto de conductor oficial de los Atlanta Hawks. Con seguridad, será el base titular, y se espera que la metralla de su explosión estadística alcance todas las facetas del juego: anotación, defensa, dirección, liderazgo…
Eso sí, no deja de estar perfectamente rodeado para no ser gallo referencia en el corral. Paul Millsap o Dwight Howard llevarán la cresta principal de la franquicia.
Resumen de franquicia
- Entrenador: Mike Budenholzer (4ª temporada en el equipo).
- Clasificación 2015-16: 48-34 (4º Este, Semifinales de Conferencia).
- Espacio salarial: -4,6 millones de dólares (por encima del límite salarial).
- Agentes libres más importantes en 2017: Dennis Schröder, Jarret Jack, Kyle Korver, Thabo Sefolosha, Tim Hardaway JR, Paul Millsap, Kris Humphries y Tiago Splitter.
El pronóstico
Elio Martínez, director de nbamaniacs, dará un pronóstico personal y subjetivo sobre lo que cree que hará cada franquicia durante la temporada 2016-17.
Ojalá el proyecto de Atlanta no acabe en nada y sigan unos años rindiendo a gran nivel y, sobre todo, desplegando un vistoso juego que les llevó a ser conocidos como «los Spurs del Este» no hace tanto. Aunque Miguel comenta el principal problema: sus rivales directos de conferencia han mejorado y el rendimiento de Howard es una incógnita si pretendemos averiguar su regularidad futura. Aún así, confianza ciega en Budenholzer: los Hawks estarán en Playoffs.