Serie ‘Arreglando el draft’: 1996, una cosecha irrepetible

Con motivo del parón de la temporada 2019-20 en la NBA, seguimos inaugurando series de contenido con las que alimentar el ansia de baloncesto que anida en todos nosotros estos días. En esta ocasión asestamos el tijeretazo inaugural a la serie Arreglando el draft.

En ella, iremos diseccionando diferentes ediciones del certamen de jóvenes jugadores, pero lo haremos a posteriori. Todos conocemos o podemos consultar el orden en el que desfilaron los jugadores de cada generación. Sin embargo, lo que acometemos ahora es una reordenación según los frutos que cada carrera particular dejó en la NBA. O sea, una clasificación de jugadores, según su rendimiento en la Liga, de cada edición del draft.

Procedemos, entonces, con el primer embrión de esta nueva serie. Nos dirigimos hasta una de las añadas con mejor material de toda la historia: el draft de 1996.

Esta generación puede computar perfectamente como una de las más refinadas de toda la historia. Entre todos sus miembros, aúnan cuatro MVP (dos de Steve Nash, uno para Kobe Bryant y otro Allen Iverson), 43 elecciones en equipos All-NBA y hasta 68 incursiones en el All-Star. No es cuestión baladí.

Ya se sabe cómo fueron elegidos en junio de 1996, y así es como deben ser catalogados con el paso del tiempo.

1. Kobe Bryant

Por unanimidad, Kobe es quien más lejos depositó credenciales. Un MVP, dieciocho veces All-Star (segundo récord histórico tras Kareem), cinco anillos, quince presencias All-NBA… Y un legado inenarrable como figura que inspiró a generaciones enteras.

Ni siquiera otros MVP como Nash o Iverson podrían respirarle en la nuca o amenazar tibiamente su liderato. Kobe solo habrá uno; como el número que ocupa en su clase del draft.

Como curiosidad, Bryant fue el segundo jugador más joven entre la primera ronda del draft después de Jermaine O’Neal. Llegaba directamente desde el instituto Lower Merion de su Philadelphia natal.

PUESTO REAL: 13º por los Charlotte Hornets (traspasado a Lakers)

2. Allen Iverson

Nublada resulta la elección entre el héroe de pantalones por los tobillos, el primer y único MVP canadiense o el mayor triplista de siempre. Al final, Iverson se anota la plata por un pelo de distancia.

Dominó el juego como uno de los atacantes más indómitos de siempre aun estando amordazado a una talla de ciudadano corriente. Desde sus 1,83 metros terminó como una de las figuras con mayores recursos de ataque en la historia de la NBA. once veces All-Star, siete All-NBA, un MVP (2001) y cuatro títulos de máximo anotador embellecen sus vitrinas. Su mayor legado, la infinita ficha de coreografías con el balón a sus órdenes.

Kobe casi siempre le ganó en el cuerpo a cuerpo, cuando se enfrentaron, excepto en el año inaugural de ambos en la competición. Iverson se llevó la corona de mejor debutante además de ser elegido como cantado número 1 del draft.

PUESTO REAL: 1º por los Philadelphia 76ers

3. Ray Allen

No puede acreditar MVP’s pero sí dos anillos de campeón; eso compensa el teórico privilegio de Steve Nash respecto a Ray Allen.

El escolta adjunta una carrera brillante. Además de los dos anillos con Celtics y Heat —en ambos resultó diferencial— presenta el mayor registro de triples de la historia de la Liga (2.973). A eso une diez All-Star o dos veces entre los mejores quintetos.

A Nash le faltó una edición de playoffs rompiendo línea de meta para introducirse dentro del podio. Lo dice un absoluto enamorado de su época en los Phoenix Suns.

PUESTO REAL: 5º por Minnesota Timberwolves (traspasado a Milwaukee Bucks)

4. Steve Nash

Ahora sí, uno de los bases con conexiones neuronales mejor asesoradas de siempre. Dos MVP, ocho All-Star, siete estancias All-NBA, cinco coronas de mayor asistente de la temporada… Y el desamor eterno de que aquellos Suns se quedasen sin disputar unas Finales.

Solo faltó el anillo. El de un equipo que reinó en la Conferencia Oeste pero nunca supo cómo gestionar el último golpe.

PUESTO REAL: 15º por Phoenix Suns

5. Peja Stojakovic

Dicho sea de paso, existe mucha distancia entre los cuatro primeros integrantes y el resto.

Peja Stojakovic fue historia de aquellos maravillosos Sacramento Kings. En dos temporadas hasta llegó a hablarse de él como actor secundario en la conversación para el MVP. Disfrutó de tres All-Star y dominó la larga distancia como pocos jugadores del viejo continente en ese momento.

PUESTO REAL: 14º por Sacramento Kings

6. Jermaine O’Neal

Abanderado del fetichismo en los Indiana Pacers junto a Reggie Miller. Seis presencias en el All-Star y tres All-NBA le sitúan por delante de compañeros de generación como la estrella de azotea imprevisible, también conocido como Starbury.

PUESTO REAL: 17º por Portland Trail Blazers

7. Stephon Marbury

Todo el talento del mundo que unas riendas poco obedientes no pudieron enderezar. Aun rindiendo por debajo de lo que dictaban sus posibilidades técnicas, Marbury pudo ingresar en dos All-Star y fue dos veces All-NBA.

Contaba material para haber sido uno de los grandes dominadores de su época, pero su lealtad al verso libre le desvió de una senda atestada de condecoraciones.

PUESTO REAL: 4º Milwaukee Bucks (traspasado a Minnesota Timberwolves)

8. Antoine Walker

Tantos kilos de más —sobre todo siendo veterano— como calidad escondían sus falanges. Tres veces All-Star.

Antoine Walker resultó uno de los peces gordos de 1996; elegido por los Celtics, que ‘pasaron’ de Kobe Bryant por estar demasiado verde (valga redundancia).

«Necesita un par de temporadas para asentarse en la Liga. No podemos esperar tanto». Ese fue el diagnóstico de M.L. Carr, general manager de Boston, antes del draft, sobre Kobe Bryant. El mismo que les llevó a optar por un jugador más hecho como Walker, que venía de obtener 15,2 puntos en y 8,4 rebotes en Kentucky.

PUESTO REAL: 6º Boston Celtics

9. Shareef-Abdur-Rahim

Llegó a ser una vez All-Star. Eterna cabeza de ratón en un par de equipos sin apenas aspiraciones, Vancouver Grizzlies y Atlanta Hawks.

Abdur-Rahim no ha permanecido en la memoria colectiva como gran jugador pero sí resultó un anotador copioso, líder de causas perdidas como eran los Grizzlies de finales del siglo XX.

PUESTO REAL: 3º Vancouver Grizzlies

10. Derek Fisher

Socio del club que convalida pechugas de pollo como si fueran palomitas de maíz —el presidente es Zion Williamson—.

Fisher no acredita ningún All-Star o presencias All-NBA; sí cinco campeonatos con los Lakers (los mismos que Kobe) en los que resultó crucial para la consecución final. La carrera de Fisher es títulos, fiabilidad ininterrumpida, camaradería, liderazgo y desenlaces con impronta personal como el del quinto encuentro de las semifinales del Oeste del año 2004. Con la serie igualada a dos victorias y los Spurs a 0,4 segundos de apropiarse la tercera, un triple de Fisher revirtió el marcador y la serie (4-2 final). No hay que dudar un ápice: a su manera, Derek Fisher es historia de la NBA.

PUESTO REAL: 24º Lakers

11. Zydrunas Ilgauskas

Lugarteniente de LeBron James en su árida primera estancia en los Cavaliers. Ilgauskas terminó su carrera NBA (en 2010) con dos presencias en el All-Star. No pudo llegar a ser campeón pese a que curvara el rizo yéndose a Miami en su última campaña en activo. Dallas se coronó con el título en aquella ocasión.

PUESTO REAL: 20º Cleveland Cavaliers

12. Marcus Camby

Cuatro temporadas máximo taponador, 12º en la lista histórica de lanzamientos boicoteados (2.331), una vez Jugador defensivo del año (2006-07) y reputación milenaria que hacía pensarse dos veces cualquier peregrinación hacia el hierro. Marcus Camby puede ser considerado uno de los perfiles defensivos más importantes de la primera mitad de los años 2000. Sin ninguna duda.

PUESTO REAL: 2º Toronto Raptors

13. Kerry Kittles

Breve carrera (nueve temporadas, una completa lesionado) que dejó un regusto decente en la NBA. Formó parte de los New Jersey Nets reyes de la Conferencia Este en el año 2002 y también se granjeó fama de defensor experimentado.

En el draft de 1996 los Nets le eligieron por delante de Kobe Bryant debido, en parte, a las tretas que el representante de la Mamba, Arn Tellem, ideó para desinteresar a New Jersey. Tellem deseaba que su representado terminara jugando en los Lakers y así acabó siendo. Cayese quien cayese.

PUESTO REAL: 8º New Jersey Nets

14. Erick Dampier

Pívot fiable, sobre todo por sus kilos, con el que acudir a mil batallas. Especialmente recordados son sus años en Golden State (1997 a 2004) y Dallas (2004 a 2010).

PUESTO REAL: 10º Indiana Pacers

15. Lorenzen Wright

«Alitas de pollo», como le conoció el genio de la pajarita. Poco más allá de alguna temporada decente en los recién instalados Memphis Grizzlies, donde actuó como guardaespaldas interior del joven Pau Gasol.

Lorenzen Wright fue tristemente asesinado a tiros en 2010 dentro de un crimen en el que su ex mujer, Sherra, estuvo inmiscuida. Nueve años después del suceso, ella fue condenada a pena de cárcel por facilitar el asesinato en primer grado. Parece que el móvil de todo resultó un seguro de vida, por valor de un millón de dólares, que Wright mantenía en caso de defunción.

PUESTO REAL: 7º Clippers

Descanse en paz el bueno de Wright y toda esta cosecha de lo más refinada donde, como resulta lógico, ningún jugador permanece en activo. Kobe Bryant fue el último en dejarlo en el año 2016.

Otros jugadores de la generación de 1996: Tony Delk, Vitaly Potapenko, Samaki Walker, Malik Rose, Dontae Jones, John Wallace, Todd Fuller…

(Fotografía de portada: Ezra O. Shaw/Allsport)


EXTRA NBAMANIACS

Nuestro trabajo en nbamaniacs es apoyado por lectores como tú. Conviértete en suscriptor para acceder a beneficios exclusivos: artículos especiales, newsletter, podcast, toda la web sin publicidad y una COMUNIDAD exclusiva en Discord para redactores y suscriptores.