Parece un mal sueño o una broma de cuestionable gusto pero no, es un hecho: Kobe Bryant jugará su último partido NBA dentro de seis días. El 13 de abril, en su Staples, con sus Lakers, ante Utah Jazz.
La leyenda de púrpura y oro ha recibido ya todo tipo de ofrendas, despedidas, dedicatorias, homenajes en general. Y su marca deportiva, Nike, no quería quedarse atrás, por lo que ha movilizado a sus tropas para rendirle tributo.
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‘Mamba Day’, el ‘Día de la Mamba’, será un día en el que el mundo del deporte diga adiós a uno de los más grandes y más competitivos atletas de la historia. Más de 200 deportistas vestirán unas zapatillas con motivos negros y dorados como las que ha mostrado ya el golfista norirlandés Rory McIlroy desde el Masters de Augusta.
Kobe, cinco anillos y 18 All-Star después, vivirá una de las noches más emotivas de su vida. Así responde cuando le preguntan en ESPN si le podrán las emociones: «Cuando llega el momento, nunca se sabe. Puede que esté aquí sentado con lágrimas saliendo de mis ojos. Lo dudo, pero podría pasar. No lo sé. Ya veremos». Si llora, no será el único.
