En menos de 24 horas después de obtener su primera victoria en la recién estrenada Copa NBA, los Knicks de Nueva York viajaron hasta Charlotte para imponerse al conjunto dirigido por Steve Clifford por 122 a 108.
Jalen Brunson guió la tercera victoria seguida de los Knickerbockers con 32 puntos, 4 rebotes y 7 asistencias rozando los 40 minutos de juego.
«Creo que vamos por el buen camino», admitió Brunson al medio ESPN. «Pero todavía nos queda mucho por trabajar. Apenas llevamos 13 partidos. Estamos en una buena racha y solo tenemos que aprovecharla», explicó.
Por su parte, Donte DiVincenzo, que repitió titularidad en ausencia de Grimes, obtuvo la mejor anotación de su carrera NBA con 25 puntos, a los que agregó 3 rebotes, 3 asistencias y 3 robos de balón con un sobresaliente 7 de 10 en triples.
También aportaron dobles dígitos anotadores Julius Randle con 21 tantos, 6 rebotes y 8 asistencias; y R.J. Barrett con 15 puntos después de causar baja en las tres últimas jornadas por unos problemas de migrañas.
«Nunca me dejo llevar. Ganemos seis o siete partidos porque cada uno es distinto. Hay que esforzarse para ganar ese partido. Concentrarnos en este en particular para que podamos desarrollar los hábitos correctos», explicó Tom Thibodeau sobre la racha de los Knicks.
Lo más destacado de Charlotte Hornets fue un LaMelo Ball con 34 puntos, 5 rebotes y 9 pases de canasta. Los de North Carolina, a remolque durante todo el encuentro, consiguieron reducir su desventaja 94-88 con apenas nueve minutos por disputarse; sin embargo, un parcial favorable para los Knicks de 15-6 guiados por Barrett y DiVincenzo acabó con todas sus opciones.
El novato Brandon Miller destacó con 29 puntos mediante un 5/7 en triples, y el recuperado Miles Bridges agregó 19 tantos desde la segunda unidad.
«Nuestro principal problema del partido fue nuestra defensa», señaló Miller. «Tuvimos muchísimas dificultades para detener a nuestro hombre en transición. Solo es una cuestión de esfuerzo, pero tenemos que mejorarlo de cara al próximo contra Boston», explicó.
Otros destacados
Hornets: En el intermedio del choque el ex jugador de ambos conjuntos, Baron Davis, fue homenajeado en las «Leyendas de los Hornets» como parte del 35º aniversario de la franquicia.
Davis llegó a los Hornets en el Draft 1999 mediante su pick 3º, y allí jugó hasta el 2005, cuando la franquicia ya estaba oficialmente a New Orleans. En 246 encuentros oficiales en Charlotte obtuvo unos guarismos de 12,6 puntos, 3,7 rebotes, 6,5 asistencias y 1,8 robos en 32,7 minutos.
Knicks: Mitchell Robinson fue una bestia bajo los tableros con 14 rebotes y 3 tapones, 11 de ellos en el apartado ofensivo.
«El año pasado estuvo fantástico y la gente no le reconoció lo bien que jugó. Y creo que este año ha pasado al siguiente nivel. Su crecimiento está siendo increíble. Es fundamental para nuestro equipo. Sus compañeros le aprecian mucho, los entrenadores, la franquicia… Por todas esas cosas que hace que nos permite tener éxito como equipo. Muchas veces su juego no queda reflejado, pero lo vemos en el rebote ofensivo, en sus jugadas al pick & roll, en la protección del aro, como se esfuerza en la pista, como se comunica, y las posesiones múltiples que nos permite. Nos hace estar muy equilibrados», destacó Thibodeau sobre Mitch Robinson.
Por su parte, Immanuel Quickley se quedó en 9 puntos y 4 rebotes con 0/5 intentos desde el triple.
(Fotografía de portada: Rob Carr/Getty Images)