20 de sus 37 puntos fueron logrados durante el último cuarto. Así es la carta de presentación de Blake Griffin durante el igualado duelo que se vivió la pasada madrugada entre los Pelicans y los Pistons, y que se llevaron de manera ajustada los segundos por 94-98.
A falta de 1:31 para finalizar el encuentro, los de la ex-Motown lideraban el marcador por un cómodo 87-95, que a punto estuvo de evaporarse cuando el reloj llegaba a su parte final. «La manera en la que hemos acabado el partido de hoy es la razón por la que hemos perdido tantos partidos de una forma tan estrecha. Esta vez hemos tenido más suerte y fuimos capaces de abrir algo más de distancia, pero no sentimos como que haya sido la victoria que queríamos lograr. Obviamente nos sirve, pero cosas como estas son las que nos hacen perder tantos partidos», comentó con total sinceridad el mismo Griffin.
Los números de Griffin alcanzaron los 14 aciertos en 28 intentos sobre tiros de campo, incluyendo un 4 de 9 en triples. A todo ello se le suman 9 rebotes y 7 asistencias. Reggie Jackson añadió 17 tantos para unos Pistons que habían perdido siete de los últimos diez encuentros.
«Griffin es capaz de llevarnos en volandas, manejando la bola, tomando buenas decisiones. Hace todo lo que se le pudiera pedir a un jugador franquicia», esgrimió Dwane Casey. «Ha estado enorme. Nos ha conferido el tono ofensivo que queríamos».
Los Pelicans, que jugaban su segundo partido sin el lesionado Anthony Davis, tuvieron la oportunidad de haberse llevado el partido en esas acciones finales, pero finalmente no pudieron completar la remontada. A falta de 20 segundos, y con 92-95 en el marcador, los locales dispusieron de un triple que hubiera puesto el empate y la opción de irse a la prórroga. Sin embargo, el fallido lanzamiento acabó convirtiéndose en un contraataque para los Pistons que puso dos puntos más de diferencia entre ambos equipos.
Jrue Holiday sumó 29 tantos para New Orleans, por los 17 de Jahlil Okafor, obligado a dar un paso hacia delante sin la presencia de Davis. «Hemos luchado durante toda la noche. Al final, no pudimos rematar la faena. Tienes que ser capaz de anotar las jugadas que te dan un partido, y no lo pudimos hacer. Hemos fallado en encontrar consistencia a través de las cosas que estábamos intentando. Eso es algo que pongo encima de mis hombros. Como entrenador, tienes que darte cuenta de la forma idónea para que tu equipo juegue con consistencia, así como quién es capaz de hacer eso», comentaba Alvin Gentry para explicar lo sucedido en los segundos finales del encuentro.
(Fotografía de portada de Rob Carr/Getty Images).