Tras una primera falsa alarma, los Warriors han dado por fin el visto bueno a la situación física de Stephen Curry y han decidido que haga su reaparición en el encuentro de hoy jueves frente a los Toronto Raptors. El base, que se ha perdido 58 partidos por culpa de una fractura en su mano izquierda, ha sido por fin declarado como apto para jugar, y realizará su esperado regreso ante el equipo que hace unos meses le impidió conquistar el Three-Peat.
La vuelta de Curry a las pistas estaba programada para el pasado domingo 1 de marzo, día que los Washington Wizards visitaban el Chase Center, pero finalmente Steve Kerr y el equipo médico de la franquicia decidieron que necesitaba más rodaje en cinco contra cinco. En consecuencia, Steph realizó una sesión de entrenamiento con los Santa Cruz Warriors de la G League para seguir cogiendo ritmo de competición y poder regresar a las pistas unos días después.
«Ha sido un largo camino para él» afirmó Steve Kerr en el programa de radio The Game. «Le encanta jugar a baloncesto, y aunque estoy muy contento por nosotros y por nuestros aficionados lo estoy aún más por él, porque va a poder volver a jugar y hacer lo que de verdad le gusta».
Curry solo pudo disputar cuatro encuentros antes de sufrir la lesión, en los que promedió 20,3 puntos, 6,5 asistencias y 5 rebotes por partido. En su ausencia (que se sumó a la baja de Klay Thompson), los Warriors han sido el peor equipo de la NBA, y si bien la temporada de los de San Francisco no tiene ya ningún aliciente, el regreso de su estrella podría ayudar a dar un buen sabor de boca a unas semanas finales que de otra forma serían bastante anodinas.
(Fotografía de portada: Ezra Shaw/Getty Images)