La situación de Boston Celtics sigue sorprendiendo a propios y extraños. Cuando empezó el curso todos aceptaron que tocaría esperar un tiempo –semanas, quizás meses–, hasta que el equipo construyese una química sobre la que empezar a mostrar todo su potencial con juegos y resultados. Pues bien, queda poco más de 30 días para concluir la temporada regular y los verdes siguen sin encontrar su rumbo.
Pese a contar con todas sus piezas en plena forma, el paso del tiempo no ha hecho mejorar al equipo, sino que lo ha ido minando hasta el punto de ganar un solo partido de los seis últimos. La caída está siendo de tal envergadura como para que Marcus Smart dijese hace días: «No estamos unidos».
La situación está clara, pero no así los culpables. Cuestionado por ello, el presidente de Boston, Danny Ainge, asegura que si bien la responsabilidad hay que dividirla, quien menos tiene es el entrenador, Brad Stevens.
«Hay una culpa a compartir entre todos, pero digo esto: ‘Brad Stevens es el menor culpable, con diferencia, de los que son responsables’. Porque sé que Brad está preparado y que está haciendo todo el trabajo posible para ayudar al equipo y arreglar la situación. Por lo tanto, es el último escalón. Sé que es quien asume más responsabilidad. En cualquier caso, es el menor de los problemas que tenemos en este momento en nuestro equipo», comenta a 98.5 The Sports Hub.
¿Tiene razón Ainge? Quizás. El año pasado, pese a las lesiones de Kyrie Irving y Gordon Hayward, quienes no estuvieron en playoffs, condujo al equipo a una fantástica carrera que a punto estuvo de llevarle a las Finales –se quedó a un partido–. Por eso, y por lo hecho en anteriores campañas, Stevens ha demostrado su valía. Lógico que Ainge crea que el problema no puede ser un entrenador que no le ha fallado desde que llegó.
(Fotografía de Tim Bradbury/Getty Images)