El jugador español entiende que su regreso a Europa era algo necesario para reciclarse mentalmente
Álex Abrines está recuperando la sonrisa. El escolta español, quien pasó dos años y medio en la disciplina de Oklahoma City Thunder, está viviendo una intensa temporada como miembro del F.C. Barcelona, equipo al que decidió marchar para recuperarse a nivel mental y luchar contra la depresión que hizo que sus últimos meses en OKC fuesen un verdadero calvario. Ahora, un año después de acordar su marcha de la NBA para retornar a Europa, señala en una entrevista concedida a Georgios Kyriakidis de TalkBasket que volver a la liga estadounidense en un futuro no está ni mucho menos descartado.
«No he cerrado la puerta a la NBA. En este momento, estoy enfocado en el Barcelona. Tengo un año más con ellos, pero nunca se sabe lo que sucederá en el futuro. Si tuviera la oportunidad de volver, tal vez lo aprovecharía. Pero no es una respuesta que tenga en estos momentos», declara.
De sus palabras puede extraerse que en ningún caso desea precipitarse. Con el club español firmó hasta verano de 2021 teniendo una opción de jugador para el curso siguiente; es decir, será en ese momento cuando sea libre para decidir su futuro. Por ahora lo único que tiene claro es que está disfrutando de estar en el baloncesto europeo y que sin duda era algo que necesitaba.
«Creo que me hacía falta un cambio, aunque tuve algunos buenos momentos en Oklahoma. Después de lo que sucedió con mi depresión, fue difícil. Necesitaba un cambio, volver a casa y creo que el Barcelona era el mejor equipo. Conocía el club, tengo amigos en Barcelona y está bastante cerca de mi ciudad natal. Necesitaba un cambio de aires», sentencia.
Durante su etapa en los Thunder Abrines fue un habitual de la rotación de Billy Donovan; tanto es así que cerró su paso por el equipo disputando 16 minutos por noche con un promedio de 5,3 puntos con un más interesante 36,8% en triples.
(Fotografía de J Pat Carter/Getty Images)