Giannis Antetokounmpo camina con paso firme hacia su segundo premio al MVP de la temporada. El internacional griego protagonizó una nueva exhibición en la que se fue hasta los 41 puntos, 20 rebotes y 6 asistencias para tumbar (85-93) a unos combativos Hornets. Desde el año 2000, tan solo Shaquille O’Neal, Chris Webber y DeMarcus Cousins habían sido capaces de registrar unos números similares. Pero ninguno de ellos en tan poco tiempo: 35 minutos.
Los Bucks comenzaron la tempranera jornada de domingo con la intención de sellar el triunfo por la vía rápida. Un parcial inicial de 11-0 hacía presagiar un plácido compromiso en el Spectrum Center, pero los Hornets se recuperaron rápido de este bofetón plantándose bien en defensa. La circulación del balón de los visitantes comenzó a estancarse y las pérdidas de balón permitían a los de James Borrego mantener el intercambio de golpes. Pese al empuje de Devonte Graham (17 puntos) y Terry Rozier (13 puntos), los Hornets no hallaban la forma de frenar a un Antetokounmpo que se iba al descanso con 21 puntos.
Tras el descanso, nuevo monólogo del griego, quien tuvo que multiplicarse en pista ante la ausencia de Khris Middleton y la poca producción de sus compañeros. Eric Bledsoe apenas aportó cuatro puntos y fue Brook López el que asumió el papel de segunda espada, con 16 puntos. Mayor número de alternativas existía en Charlotte. P.J. Washington (12 puntos) y un inspirado Willy Hernángomez (10 puntos y 13 rebotes) castigaban la pintura, mientras los locales aprovechaban los minutos de Giannis en el banquillo para asomarse al marcador. Porque frenar a este cuando estaba en pista fue imposible.
El esfuerzo realizado pasó factura en el parcial inicial, en el que ninguno de ambos equipos fue capaz de firmar una ofensiva regular. Los Hornets apenas pudieron anotar 7 de los 21 tiros que intentaron. Pero Antetokounmpo no falló. El alero volvió a echarse a su equipo a las espaldas para imponer la lógica con un parcial definitivo de 11-4 en los últimos minutos y sellar la victoria.
Pese a la derrota, los Hornets firmaron un encuentro muy serio y pusieron fin a una racha muy especial. Los Bucks encadenaban 83 partidos con al menos 100 puntos anotados. Hasta hoy. Aún así, la producción de Antetokounmpo fue suficiente para que los Bucks (52-8) sumen su sexta victoria consecutiva y sigan comandando con autoridad la NBA.
(Fotografía de portada de Patrick Smith/Getty Images)