Ayer se cumplió al 99% eso del «son los que están y están los que son».
Tan solo Boston Celtics y Golden State Warriors se quedaron con la ropa de calle puesta en una jornada donde se respiró baloncesto por la totalidad del mapa.
Vamos, que jugaron todas las franquicias de la NBA a excepción de dos en una velada absolutamente mastodóntica. 14 partidos, 28 equipos. Y como bien sabéis, es imposible cubrirlos todos.
Así que, como obsequio de Nochebuena, ahí van un par de líneas sobre cada uno.
Washington Wizards 109 – 126 Charlotte Hornets
De los partidos más difíciles de ver en términos de clasificación, el turrón se lo comió «quien debía».
Los Hornets, que se han impuesto en tres de sus cinco últimos compromisos, arrasaron en el cuarto definitivo con un parcial de 19-34, con un buen LaMelo Ball (23 puntos y 9 asistencias) y un Moussa Diabate que firmó un estupendo doble-doble de 12 puntos y 18 rebotes, ocho de ellos ofensivos.
Anotar el doble de triples que su rival (20 a 10) determinó el vencedor del encuentro.
Brooklyn Nets 114 – 106 Philadelphia 76ers
¿Será Michael Porter Jr. All-Star? No lo sabemos, pero lo que no podemos negar es que está ofreciendo aquello que nos prometió. El segundo/tercer espada de los Nuggets se ha erigido en el líder ofensivo de los Nets sin desfigurarse en la etiqueta que muchos temían: la de un ‘lanzamandarinas’.
El forward anota más de 25 puntos por noche rozando el ansiado 50-40 de eficacia en porcentajes de tiros de campo y triples. A los 76ers de Joel Embiid (27 puntos y susto en 31 minutos del camerunés) les clavó 28 puntos para terminar como el máximo anotador de la velada, bien secundado por Nic Claxton (16 puntos, 10 rebotes), Egor Demin (20 tantos, 5 asistencias) y la que sigue siendo una de las defensas más en forma del momento.
Balance de 6-4 para Brooklyn en sus diez últimos partidos.
Chicago Bulls 126 – 123 Atlanta Hawks
El desplome de los Atlanta Hawks empieza a ser tan real como la resurrección de los Chicago Bulls. Y eso que lo tenían todo bajo control (llegaron a ganar por dieciocho) hasta una última manga desastrosa (18-34).
Con la remontada de ayer –para barrer a los de Georgia por 3 a 0 en su serie particular de RS– los de Illinois se quedan a un solo partido de adelantarles de nuevo en la clasificación.
Dos fanáticos del triple-doble en pista: Josh Giddey lo hizo y además en tiempo récord (19 puntos, 11 rebotes, 15 asistencias) mientras que Jalen Johnson se quedó a las puertas (24 puntos, 9 rebotes, 10 asistencias).
El regreso de Trae Young (22 puntos, 15 asistencias) no ha traído la Navidad a Georgia.
A triple-double in just 20:02 of action 🔥🔥🔥 pic.twitter.com/NmF3ajL4Ir
— Chicago Bulls (@chicagobulls) December 24, 2025
New Orleans Pelicans 118 – 141 Cleveland Cavaliers
Hasta aquí otra de las rachas más inusitadas con las que clausurar el año. Y menos mal (para los Cavs) porque de haber vuelto a perder, mejor no presentarse mañana en el Christmas Day. Pero salvaron los muebles ante NOLA y lo hicieron de forma contundente.
Volvió a funcionar el plan de Zion ‘sexto hombre’ Williamson, aportando 26 puntos en 21 minutos desde el banquillo, pero esta vez su irrupción quedó inerte ante el bombardeo exterior de unos Cavs cuya apuesta por el triple (lanzaron 49 por los 26 de los New Orleans) les salió redonda.
El regreso de Jarrett Allen y dos triunfos ante rivales de abajo (Hornets y NOLA) le da un respiro a kenny Atkinson y mantiene a raya a los buitres.
Milwaukee Bucks 114 – 94 Indiana Pacers
En ausencia de Giannis Anteotokounmpo, Kevin Porter Jr. (24 puntos) y el quinto en discordia por el MIP, Ryan Rollins (23 puntos desde la banca) comandaron la victoria ante unos Pacers que se hunden sin remedio en lo más profundo del pozo, sumando solo un triunfo más que los Washington Wizards.
Mucha pena ver así a unos subcampeones que, aún sin Haliburton ni Turner, mantienen en pista al resto del núcleo (Siakam, Nembhard, McConnell, Mathurin), que les hizo firmar una campaña inolvidable.
Toronto Raptors 112 – 91 Miami Heat
Segunda victoria en menos de diez días que los Raptors arañan a los Heat, ambas además jugando a domicilio. Repetir en el Kaseya Center de poco sirve si te quedas en un 40% en tiros de campo y un 27% en triples.
Dominio absoluto de los de Darko Rajakovic, con Scottie Barnes al frente del ataque (27 puntos), y con la dupla interior de los Heat (Adebayo – Ware) sin olerla en todo el encuentro. Destacar también el doble-doble del lottery pick, Collin Murray-Boyles, con 11 puntos y 12 rebotes.
Denver Nuggets 130 – 131 Dallas Mavericks
En un entremés de lo que anticipa a ser su próxima década en la NBA, Cooper Flagg tricotó la que puede ser su noche más completa hasta la fecha ante un rival de primera línea como la franquicia del Jóker.
Creemos que ni ellos mismos saben si tankear o pelear. Si luchar o dejarse llevar. Pero cuando tienes a dos jugadores en pista como Davis y Flagg, y con Kyrie Irving cada día más cerca de regresar, cuesta no apurar la senda de la competitividad.
New York Knicks 104 – 115 Minnesota Timberwolves
Con trabajo y buena letra, los T-Wolves ya vuelven a ser los mismos que vimos hace unos meses. Han sabido perseverar y no desesperarse, para colocarse quintos del Oeste con la segunda mejor racha de victorias en diez partidos, tras la estela de los Spurs.
Al partidazo de Towns (40 puntos) contestó igualmente Edwards (38), mientras Bones Hyland pidió un poco de atención ante la búsqueda desesperada de un point guard: mejor +/- del partido, con un +24 en 25 minutos en pista.
Oklahoma City Thunder 110 – 130 San Antonio Spurs
Los Thunder ya tienen su kriptonita de la 2025/26.
Cuarta derrota de la temporada de los vigentes campeones de la NBA, la mitad a manos de los Spurs, quienes están demostrando ser más que simplemente «el equipo de Wemby».
Los Ángeles Lakers 108 – 132 Phoenix Suns
Durante años y años, LeBron James fue argumento suficiente y por sí solo para sumar un triunfo tras otro. Ya no. Ahora es un fenomenal escudero de un vestuario aspirante. Y estos Lakers son los Lakers de Doncic, no los Lakers de James.
Sin el esloveno, y con Austin Reaves aún recuperándose y saliendo de reserva, los angelinos fueron un juguete en las manos de unos Suns cuyo quinteto inicial al completo estuvo en dobles dígitos anotadores, con Dillon Brooks pasándoselo realmente en grande mientras los de Jordan Ott aguantan el tipo como una de las grandes sorpresas positivas del primer trimestre.
Memphis Grizzlies 137 – 128 Utah Jazz
Si a Santi Aldama le va bien, en NBAManiacs somos felices.
Ayer le volvió a ir de lujo al canarión con su sexta titularidad del curso (este año parte habitualmente de suplente), con un boxscore sensacional de 37 puntos y 7 asistencias, sintiendo desde primera hora ‘el picorcito’ desde el triple (7 de 13).
Taylor Hendricks (en quien los Jazz tienen puestas muchas esperanzas ahora que está de vuelta) firmó su mejor anotación como profesional (21 puntos), pero el duelo se lo llevaron los de Tennessee que resisten en la zona de play-in, sobreviviendo a la peor versión (anoche ausente) de Ja Morant.
Orlando Magic 110 – 106 Portland Trail Blazers
Sigue sin ser el equipo de Paolo Banchero, pero aún con su versión difuminada (12 puntos y solo ocho tiros de campo) los Magic se impusieron a los Blazers con Desmond Bane y Anthony Black superando la veintena de puntos y un Tyus Jones también solvente como titular ante la baja de Jalen Suggs.
Portland (sin Robert Williams, Thybulle ni Grant) peleó hasta el final, pero llega hasta donde llega.
Detroit Pistons 136 – 127 Sacramento Kings
Cuando la columna vertebral cumple según lo previsto (Cunningham, Duren, Ausar, Tobias), es muy complicado que estos Pistons pinchen. Y menos ante unos Kings que dan una cal por cada diez de arena.
Con el duelo encauzado en los tres primeros cuartos (24 puntos de renta máxima), los de la Motor Town aflojaron en la recta final mientras DeMar DeRozan hacía sus números (37 tantos).
Nada impedirá que los Pistons cierren 2025 como los líderes del Este… y los Kings, parece, como colistas del Oeste.
Houston Rockets 108 – 128 L.A. Clippers
¿Habremos vendido la piel del oso antes de haberlo matado?
El paciente no solo respira sino que recupera cierto ritmo cardíaco. Y lo hace de la mano de un Kawhi Leonard vintage: 41 puntos del, otrora, two-way más determinante del planeta básquet.
Dos triunfos consecutivos y no ante dos cualesquiera: Lakers y Rockets. Enero nos dirá si se ha tratado de un espejismo o del comienzo de un comeback que teníamos casi totalmente descartado.
(Fotografía de portada de Kiyoshi Mio-Imagn Images)





