No fue ni mucho menos de la mejor forma posible, pero el cúmulo de resultados propiciaron tal circunstancia. Sin ganar, los Raptors se convirtieron en los nuevos campeones de la División Atlántico. Y todo por la derrota de los Nets ante los Hawks.
Los de Dwane Casey cayeron por 100-105 ante unos Knicks que, de haber perdido, habrían quedado fuera de los Playoffs. Hacía unas cuantas temporadas que los canadienses no lograban alzarse con este título. Concretamente, era algo que no saboreaban desde la campaña 2006/07.
Las camisetas rojas preparadas con el lema ‘El Atlántico es nuestro’ quedaron deslucidas dentro de un vestuario que estaba cabizbajo por lograr esta buena noticia de una mala manera.
«Nos sentíamos bien por ganar la División», expresó DeMar DeRozan. «No creo que nadie nos hubiera elegido antes para ganarla, así que es un gran logro. Todavía tenemos ansias de más».
Este inesperado galardón les garantiza ventaja de campo en la primera ronda de los Playoffs, aunque como señalase Kyle Lowry esto fuese algo «agridulce».