En el Madison Square Garden se vivió una jornada de muchísimas emociones con el retorno a la ciudad de R.J. Barrett e Immanuel Quickley, ambos traspasados el 30 de diciembre en la operación por O.G. Anunoby.
El público neoyorquino se volcó totalmente con ellos, y más que jugadores del equipo rival, todavía parecía que seguían vistiendo la camiseta de los Knicks. Pero una vez que el árbitro echó a rodar el balón, se acabaron los miramientos. Tanto Randle como Brunson se encargaron de aguarles la fiesta.
Randle terminó con su 14º triple-doble de carrera con 18 puntos, 16 rebotes y 10 asistencias para imponerse a los Raptors por un cómodo 100 a 126.
«Esos muchachos son especiales para mí. Con ellos se construyó una relación muy especial», admitió Randle al NY Post. «Sé que hablan de lo mucho que significo para ellos, pero ellos también significan mucho para mí. Para serte honesto, me enseñaron mucho sobre liderazgo. Cómo comportarme. Cómo ser abierto. Cómo ser honesto con todos», explicó.
El traspaso ha sido un win to win de manual para ambos. Los Knicks atesoran un 9-2 desde la llegada de Anunoby y han pasado del 8º al 5º lugar de la Conferencia Este. Por su parte, Quickley está jugando de titular como tanto ansiaba y Barrett, alejado de Brunson y Randle, puede tener más el balón y jugar sin tanta ansiedad.
Barrett fue el máximo exponente de los suyos con 20 puntos, 8 rebotes y 4 asistencias, y su compañero agregó 12 tantos, 2 rebotes y 11 asistencias en su haber.
«Esta noche ha sido increíble. Gracias a todos los seguidores», destacó R.J. Barrett. «Tuvimos un vídeo tributo. No pensé que tuviéramos uno. Pero ha sido genial. Aprecio muchísimo mi tiempo aquí. Al volver he sentido muchísimas emociones», reconoció.
Por su parte, Quickley no paró en todo el día. Charló con antiguos compañeros, antiguos entrenadores, especialmente con Johnny O’Bryant; y en definitiva con todo aquel que conociera de su etapa como Knick.
«He estado todo el día tropezándome con gente desde el vídeo de scouting. Ha sido un día muy distinto para mí. Ha sido bueno ver a mis amigos. Obviamente queríamos una victoria… Buena suerte para ellos», concluyó.
Otros destacados
Knicks: Jalen Brunson se encargó de no darle ni un minuto de respiro a Quickley, y tras el paso por vestuarios (59-57), pusieron la directa para acabar con los Raptors y obtener su tercer triunfo consecutivo.
El base formado en Villanova explotó con 38 puntos, 5 rebotes, 9 asistencias y un robo de balón mediante un 5 de 11 en triples.
Otros aspectos a destacar fue la pelea por el rebote, con un favorable 61-31 para los Knicks pese a la lesión que sufrió Isaiah Hartenstein. El pívot no pudo jugar en la segunda mitad tras sufrir un golpe en su tobillo izquierdo.
En ausencia, pasito hacia delante de un Precious Achiuwa que venía jugando horrible con 18 puntos y 11 rebotes. También sumaron dobles dígitos Donte DiVincenzo con 17 tantos, y O.G. Anunoby contribuyó con 14 puntos y 7 rebotes.
Respecto máximo por la labor de Anunoby que desde su llegada atesoran un 9-2. En esos 11 partidos los Knicks se han convertido en una de las mejores defensas de la liga con apenas 100,9 puntos encajados, y su +/- resulta ridículo con +190 en 404 minutos disputados, el mejor de la historia en dicho tramo.
«Sí, estoy impresionado. Siempre quiero impactar al ganar. Por eso quiero seguir teniendo un buen +/- en el equipo», reconoció Anunoby.
Raptors: Los canadienses no solo han perdido a Anunoby, también recientemente a Siakam, por lo que van a tener que trabajar muchísimo si quieren ponerse al día. Apenas han obtenido un solo triunfo en sus últimas siete jornadas.
El escolta Gary Trent Jr. sumó 16 puntos, y el rookie Gradey Dick agregó en su cuenta 11.
(Fotografía de portada: Sarah Stier/Getty Images)