Con Kevin Durant y Bradley Beal de descanso, los Phoenix Suns ganaron en el Madison Square Garden por obra y gracia de Devin Booker. El base, porque de eso juega ahora, no solo fue el director de orquesta de los de Arizona con 28 puntos y 11 asistencias, sino que se encargó además de decidir el duelo con un triple en el último segundo gracias al que, según aseguró, se siente ya «parte de la historia».
Jalen Brunson había empatado el duelo a 113-113 en la última posesión de los locales, pero quedaban aún muchos segundos por delante que Booker no desaprovechó. Los neoyorquinos trataron de forzarle a soltar el balón mediante un dos contra uno, pero Jordan Goodwin le devolvió rápidamente el esférico para que pudiera botar hacia su zona de confort y, tras quedarse en el cambio de asignación con Julius Randle, ganar el espacio justo para levantarse desde el perímetro. Y, como letal anotador que es, no perdonó.
Brunson estuvo cerca de añadir un componente de epicidad aun mayor al duelo con su triple a la desesperada que habría forzado la prórroga, pero este se salió del aro y evitó un final de leyenda a la vez que la décima victoria de los Knicks este curso. Jalen se quedó pues en 35 tantos, con los que se consagró como máximo anotador del choque pero que no valieron para superar en el clutch a un hombre que se está revelando como uno de los más decisivos de la competición.
La séptima consecutiva
Y es que hace siete partidos que Booker regresó a las pistas, y desde entonces Phoenix solo conoce la victoria. De empezar con un dubitativo 4-6, a colocarse con un 11-6 que les aúpa a la tercera posición del Oeste sin necesidad de que su tan temido Big 3 haya siquiera hecho su estelar debut. En esta ocasión ni siquiera los otros dos integrantes fueron necesarios. Si está Devin, los Suns sonríen.
En esta ocasión el base formó pareja con Eric Gordon, que sigue tapando huecos en la plantilla con actuaciones sensacionales. Con un 6/9 en triples, el escolta se fue hasta los 25 tantos con los que dar alas a los de Arizona durante sus mejores tramos, convirtiéndose en el escudero ideal y ayudando a las victorias se sigan sumando al casillero pese a las importantes ausencias.
(Fotografía de portada: Rich Grassle/Getty Images)