Bostjan Nachbar, quien fuera jugador NBA y ACB entre otras competiciones, ha anunciado de manera oficial su retirada del baloncesto profesional. El esloveno ha querido despedirse a través de una extensa carta donde ha dado las gracias a todos aquellos que ha compartido momentos durante sus 20 años dedicados al mundo de la canasta.
Nacido en la localidad de Slovenj Gradec (Eslovenia) hace 37 primaveras, Nachbar fue seleccionado en el puesto 15º de la primera ronda del Draft 2002 por Houston Rockets. En la franquicia tejana disputó tres campañas para jugar más tarde en New Orleans/Oklahoma City Hornets y New Jersey Nets. Sus promedios de carrera NBA han sido de 7,1 puntos y 2,6 rebotes en 317 encuentros oficiales (25 como titular).
Asimismo, ha pasado por las ligas de Eslovenia, Italia, Rusia, Turquía, Alemania y España por partido doble, jugando en las filas del F.C. Barcelona y Real Betis. En la competición española sus números han sido de 8,9 puntos y 2,5 rebotes en 140 partidos de temporada regular.
Su despedida
«Aunque hace algunos meses que no piso una cancha de baloncesto, sentí que podría tener la posibilidad de volver a jugar. Pero después de pensarlo mucho me he dado cuenta que mi deseo no es lo suficientemente grande y tengo otras grandes prioridades. Mi carrera en el baloncesto ha terminado.
Detrás de mí dejo una carrera profesional de 20 años. Cuando era niño en Eslovenia soñaba con jugar grandes partidos y en estadios famosos abarrotados de gente. Y he conseguido hacerlo realidad. Trabajé dure, tuve mucha suerte y también un poco de talento. Pero ahora mismo no podría escribir esta carta si no hubiera tenido a mi alrededor a ciertas personas. Y me gustaría aprovechar esta oportunidad para agradecérselo.
A los seguidores: Gracias por vuestro apoyo con la Selección o con los clubes. Siempre dije que jugué este deporte para vosotros y me he divertido de una manera increíble haciéndolo. Es imposible describir la energía que sentía gracias a vuestros ánimos. Era adicto a eso y lo voy a echar mucho de menos.
Compañeros de equipo: A todos mis compañeros a lo largo de toda mi carrera deportiva gracias por compartir la pasión por este deporte. Nunca habría disfrutado tanto si no lo hubiera hecho con vosotros. Con muchos de vosotros guardo una gran amistad que se mantendrá incluso después de mi retirada.
Entrenadores: Cada uno de vosotros me ayudasteis a vuestra manera. Gracias por ser mis maestros de una manera desinteresada, por hacerme un mejor jugador y una mejor persona. Os respeto porque me empujabais, incluso cuando no tenía fuerzas.
Mis padres: Siempre os estaré agradecido por enseñarme como seguir mi camino. Reconocisteis mi talento y sacrificasteis mucho solo para que pudiera alcanzar mis sueños. Solo espero que os haya hecho sentir orgullosos.
A mi hermano Grega: Tal vez nunca llegues a entender lo mucho que me has ayudado. Conocías mi juego hasta el último detalle y sabías avisarme cuando más lo necesitaba. Como nunca pudiste tener una carrera como jugador, quería que mi éxito también fuera para ti. Esa fue siempre mi mayor motivación.
Tara y Ajda: Vuestra bonita y dulce inocencia me trajo más satisfacciones que todas las victorias y campeonatos. Vuestras palabras: ¡Papá eres el mejor! Significaron más que cualquier momento en la pista. Mi atención ahora es toda para vosotras y no podría estar más contento por ello. ¡Ojalá pudiera jugar algunas temporadas más solo para vosotras!
Anka: Hemos estado juntos desde que no era nadie. Me ayudaste en cada paso y dejaste tu carrera para que pudiera construir la mía. Donde sea que viviéramos lo hiciste nuestro hogar. Pasamos por muchos altibajos juntos. Me habría rendido, pero contigo me volví a levantar y alcancé nuevas alturas. Siempre eres muy positiva y siempre me crees. La palabra «gracias» nunca será suficiente. Te quiero.
Baloncesto: Para mí nunca fue un juego de victorias y derrotas. El baloncesto son personas, recuerdos, experiencias y sentimientos. El baloncesto siempre será parte de mi vida. Estoy entusiasmado por lo que me trae el futuro.
Gracias»