Pasada una noche del Draft en la que sus esfuerzos por conseguir lo deseado fueron en vano, Boston Celtics continúa con la idea de hacerse con alguno de los grandes jugadores interiores que engrosarán la agencia libre; sin embargo, son bastante pesimistas respecto a sus opciones para convencer a alguno de ellos, informa masslive.com.
La lista de pívots que serán agentes libres a partir del 1 de julio está repleta de talento. Hablamos entre otros de Marc Gasol, LaMarcus Aldridge, DeAndre Jordan y Kevin Love; jugadores que según los verdes podrían decantarse por firmar con equipos que sean claros aspirantes al anillo, algo que ahora mismo Boston no puede confirmar.
Más allá de los que ellos piensen, lo cierto es que los rumores sólo han unido el nombre de Boston al futuro de Love, jugador que debería renunciar a seguir jugando en un equipo que acaba de disputar las Finales para convertirse en un ‘Celtic’. En el caso de DeAndre Jordan, Los Angeles Times ha informado que tiene previsto reunirse con cuatro equipos: Lakers, Bucks, Mavericks y Clippers. Por último, Boston tampoco aparece en la lista de equipos vinculados a Aldridge o Gasol; dándose casi por hecho que este último continuará en Memphis.
Otros jugadores que podrían suscitar el interés de los Celtics son Greg Monroe, Brook Lopez, Paul Millsap y Draymond Green, aunque este último será agente libre restringido, y se espera que los Warriors igualen cualquier oferta que reciba.
¿Cómo convencerlos?
El pensamiento de la franquicia de Massachusetts es que para competir en la agencia libre deben hacer que los jugadores confíen antes en su proyecto, tal y como señala Danny Ainge. «Tenemos que convencer a la gente de que aquí podemos ofrecerle la oportunidad de hacer dinero, jugar, explotar su potencial y ganar. Creo que Boston será un buen destino para alguno de ellos», expresó poco después de que finalizase la temporada.
A la espera de conocer qué piezas incorporan de cara al siguiente curso, Boston cuenta hasta el momento con Kelly Olynyk, Jared Sullinger y Tyler Zeller como jugadores interiores.