Jaylen Brown y Marcus Smart fuera y Tatum firmando un 3/16 en el tiro. Estos parecen los ingredientes básicos para una derrota de los Boston Celtics, pero el caso de esta madrugada fue totalmente opuesto. Los de Mazzulla aprovecharon estas adversidades para sacar a relucir la enorme profundidad de su plantilla e imponerse a los Grizzlies por 119-109, conservando la primera posición del Este en todo un alarde de armas y recursos.
Frenar a Tatum parecía ser la principal labor de prácticamente cada hombre de Memphis que pisó la cancha, y podría decirse que lo lograron pero solo a medias. Jayson no pudo pasar de los 16 puntos en una noche desastrosa en el tiro y en la que necesitó de los tiros libres para sumar la mayoría de ellos, pero la atención generada con su presencia y sus movimientos facilitó la vida a sus compañeros, que no dudaron en aprovecharlo. De los nueve jugadores locales que pisaron la pista, ocho terminaron con dobles dígitos en anotación, compensando el mal partido de su estrella y desarbolando a unos Grizzlies que no supieron responder.
Derrick White, con 23 tantos y 10 asistencias, se encargó de ejercer como referencia ofensiva, dando además un paso adelante en el último cuarto, en el que llegaron 10 de sus puntos. Fue también fundamental Al Horford, que anotó 11 de sus 16 también en este periodo, permitiendo a Boston recuperar el control después de que Memphis remontase el 61-48 con el que se llegó al descanso y decantando la balanza hacia los de verde.
Otro hombre clave fue Sam Hauser, que con un 6/11 en triples firmó el mejor partido de su carrera en este sentido y dio alas a los suyos desde el perímetro. Los de Mazzulla volvieron a brillar en este aspecto y terminaron con 21 tiros exteriores anotados con un 41,2% de acierto (a pesar del 1/8 de Tatum), recordando al resto de la liga de lo que son capaces cuando tienen un buen día en esta materia.
«Teníamos a algunos de nuestros mejores jugadores fuera, pero eso ha sido una oportunidad para que el resto demuestre de lo que es capaz» comentó Hauser. «Hemos intentado llenar el hueco que dejaban los que no han podido estar. Ellos aportan mucho siempre, pero hemos hecho todo lo que hemos podido para intentar darle al equipo la victoria».
Los de Massachusetts doblegaron así a unos Grizzlies a los que les sigue costando mucho sumar triunfos en esta fase de la temporada. Con 9 partidos perdidos de los últimos 12, el cuadro de Jenkins está dejando más dudas en estas semanas que en todo el resto de la temporada, y este tropiezo ante unos Celtics tan mermados desde luego no ayuda a despejarlas. Pese a que Ja Morant y Desmond Bane, con 25 y 18 puntos respectivamente, trataron de dar respuesta al bombardeo de triples, no fueron capaces de ofrecer sus versiones dominantes que tanto daño han hecho a otros equipos, y acumularon otra derrota que les obliga a mirar más para atrás que para adelante en la clasificación.
(Fotografía de portada: Brian Fluharty/Getty Images)