«Es el partido que mejor hemos jugado físicamente como equipo«, así de satisfecho acabó el entrenador de los Boston Celtics, Brad Stevens, después de que su equipo se impusiese a Sacramento Kings por 106-84.
Los verdes, liderados por los 20 puntos y 11 rebotes de Jared Sullinger, rompieron de esta manera una racha de cuatro derrotas consecutivas, quedando así a solo un partido de diferencia de los Miami Heat, equipo que marca el límite para alcanzar los playoffs.
Por parte de los Celtics también destacaron las actuaciones de Kelly Olynyk, quien agregó 15 puntos, Jae Crowder, con 12, y Marcus Smart, autor de otros 11.
Los de la capital de California no estuvieron en ningún momento en disposición de ganar el partido; tanto es así que pasaron los 48 minutos por detrás en el marcador, perdiendo en los cuatro parciales del encuentro.
En cuanto a las actuaciones individuales, nadie tuvo su día en los Kings, muestra de ello es que Rudy Gay y DeMarcus Cousins se combinaron para un 9 de 36 en el lanzamiento.
Cousins, expulsado
El pívot de los Kings se vio obligado a abandonar la cancha en el último cuarto por dos técnicas. La acción decisiva se produjo cuando peleaba con Marcus Smart por la posición en un rebote, acción tras la que Cousins agarró a su rival por el brazo hasta lanzarlo al suelo.
Thompson, olvidado
Tyrone Corbin, tras dejar atrás su papel como entrenador interino, empezó a realizar cambios en su rotación al dejar sin jugar un solo minuto a Jason Thompson. En su lugar como titular actuó Ryan Hollins.