Bradley Beal volvió anoche a la que fue su primera casa en la NBA. El escolta, que jugó en los Wizards entre 2012 y 2023, disputó su primer encuentro como visitante en el Capital One Arena de Washington, en el que tuvo la oportunidad de lucir como en sus mejores tiempos. Con 43 puntos, Beal protagonizó una nueva exhibición sobre el parqué que le ha visto firmar tantas, y comandó el plácido triunfo de los Suns por 112-140.
Consciente de que era una noche especial tanto para él como para muchos de los presentes, Bradley ofreció la versión que la situación requería. Buscó ser protagonista y, ante unos endebles Wizards, no tuvo problema para lograrlo, dando lugar a un recital de formas de anotar que solo frenó cuando Vogel, viendo el partido resuelto, lo mandó al banquillo seguido de una sonora ovación. Beal anotó 16 de los 21 lanzamientos que intentó, que llegaron desde todas las zonas y de todas las maneras pero con un denominador común: su efectividad.
Bonito homenaje
Antes de que el escolta apabullara a su ex equipo, este quiso agradecerle todos sus años de servicio con un vídeo homenaje en el que recordar su paso por la franquicia. En él, se mostraron imágenes desde el momento en que fue elegido en el draft hasta su última temporada, repasando sus hitos más importantes y destacando algunas de sus canastas más significativas.
Y es que al fin y al cabo Beal terminó su trayectoria en el equipo como segundo máximo anotador histórico (se quedó a solo 160 puntos de la primera posición), máximo triplista y tercer jugador con más partidos disputados. Junto a John Wall, formó una dupla que convirtió a los capitalinos en un equipo relevante después de muchos años de mediocridad, firmando el mejor balance desde 1979 (49-33 en 2017) y quedándose a una sola victoria de las que habrían sido las primeras Finales de Conferencia también desde el 79.
No obstante, el escolta olvidó todo esto una vez se lanzó el balón al aire y salió decidido a dar a su nuevo equipo un nuevo triunfo. El choque llegó prácticamente decidido al descanso gracias en cierto modo a la exhibición de Bradley, que ofreció una imagen ilusionante para unos Suns que cada vez parecen ir a más.
(Fotografía de portada: Andy Lyons/Getty Images)